Editorial
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Conmemoración significa memoria

Conmemoración significa memoria

El 50 aniversario del Colegio es un motivo de conmemoración, un ejercicio de la memoria que nos permite recordar un acontecimiento heroico: el de la creación del Colegio de Ciencias y Humanidades. El CCH nació de una idea, acaso de una utopía de don Pablo González Casanova, la cual inició en 1953 y adquirió su primera concreción el 26 de enero de 1971, con la aprobación de su proyecto educativo por el Honorable Consejo Universitario.

A partir de ese momento histórico han sido muchos los retos, pero también las oportunidades de superarlos para formar a más de un millón de jóvenes, que la sociedad nos ha confiado para hacer de ellos grandes profesionistas y ciudadanos ejemplares. Las y los estudiantes han sido la principal riqueza del Colegio y en sus manifestaciones de afecto y de orgullo cecehachero, hemos encontrado motivos suficientes, para cumplir con gusto nuestras tareas y compromisos.

Las y los maestros del Colegio fueron aquellos jóvenes fundadores que creyeron en la utopía de un Modelo Educativo innovador, dentro y fuera de la Universidad, y a esos nobles ideales consagraron su vida, y hoy, 50 años después, tenemos el privilegio de saber que un buen número de ellos todavía nos acompaña. A ustedes, queridas profesoras y profesores, les expresamos nuestra gratitud y les decimos que la escuela, por la que ustedes lucharon a lo largo de muchos años, se mantiene en pie, y que, a pesar de la crisis sanitaria del presente, esperamos regresar a las tareas presenciales para recuperar la calidez comunitaria que nos caracteriza, y para reafirmar, una vez más, nuestro sentido de responsabilidad y nuestra vocación docente.

El Colegio también agradece a sus trabajadores administrativos y de base, porque a ellos ha correspondido hacer su mejor esfuerzo para lograr nuestras metas académicas. Los trabajadores han sido parte de esta gran familia cecehachera, en los pasillos, jardines y aulas han crecido sus hijos, han sido alumnos del Colegio, y muchos de ellos han regresado a ejercer la docencia, pues como suele decir el señor Secretario General del STUNAM, “la mejor universidad del país tiene a los mejores trabajadores”.

El CCH tiene también una deuda fundamental con sus cuerpos directivos del presente y del pasado; quien conoce los planteles en tiempo real sabe que se trata de espacios dinámicos, diversos y muy intensos. En ellos cada día se aprende una lección nueva. El tiempo de servicio es completo y las funciones a desarrollar exceden siempre los manuales administrativos. Ser funcionario implica asumir una gran responsabilidad, que sólo es llevadera por el cariño entrañable a nuestra institución.

El Colegio, en estos 50 años, también ha asimilado una gran lección: debe su fortaleza originaria a los principios y valores de la Universidad Nacional Autónoma de México, a sus escuelas, facultades, centros e institutos, de las cuales ha obtenido los mejores frutos para distribuirlos entre su comunidad; de las autoridades centrales siempre ha tenido apoyo y auxilio, para conjurar las tempestades y cuando el horizonte se ha tornado oscuro, siempre ha habido una mano solidaria de la Universidad, para guiar en el camino a uno de sus hijos.

Quiero concluir diciendo que la palabra conmemoración no sólo significa festejo, sino memoria. La memoria implica recordar y la palabra recuerdo lleva en su interior el corazón. Para los antiguos, el recuerdo y la memoria se guardaban en el corazón. Sólo recordamos lo que amamos. Por eso el Colegio, al igual que las y los compañeros que hemos perdido en el marco de la cruel pandemia, perviven en lo más puro de la memoria. 

 

Dr. Benjamín Barajas Sánchez

Director General CCH