Práctica docente
La investigación educativa representa una oportunidad del profesorado del Colegio para reflexionar sobre su práctica docente en las aulas y laboratorios, con el propósito de recuperar los aciertos, reconocer las zonas de oportunidad y hacer los cambios correspondientes, en beneficio del aprendizaje de nuestro alumnado.
Como todos sabemos, la pandemia puso en cuestión nuestros paradigmas respecto a la docencia presencial, y nos obligó a intentar una enseñanza a distancia, mediada por las tecnologías. Los resultados de este tremendo esfuerzo han sido desiguales, si se considera un acceso deficiente a la conectividad y a los equipos de cómputo, como ocurrió con el 20% de nuestro alumnado, es decir, un poco más de 11,000 estudiantes que requirieron de préstamos de tabletas y de becas para la conexión a internet.
En el caso del profesorado, el asunto también se complicó en el ámbito del conocimiento y uso de las plataformas y las tecnologías digitales para adaptar, en muy poco tiempo, un conjunto de estrategias que habían sido pensadas para la docencia presencial, acordes con el Modelo Educativo del Colegio. Y aunque la UNAM y el CCH hicieron grandes esfuerzos de apoyo a los docentes, también los resultados de los cursos, desde su perspectiva, fueron, al menos, agridulces.
Lo cierto es que tanto desde la mirada del alumnado y de los maestros, se extrañó la convivencia y el diálogo; y el aislamiento ocasionó una serie de afectaciones en la salud que han impactado las tareas presenciales en la pospandemia… y pese a ello, se ha dicho que después de dicha urgencia sanitaria, las prácticas educativas tradicionales se están modificando de forma acelerada, en lo cual influye, de manera innegable, el impacto de las tecnologías y las redes sociales en las prácticas comunicativas de los jóvenes estudiantes.
En consecuencia, desde una perspectiva optimista, podríamos decir que este conjunto de cambios, en cierta medida impuestos, también representan oportunidades, para que los sistemas educativos puedan redirigirlos hacia los objetivos institucionales, aprovechando algunas de las lecciones de la pandemia, sobre todo, para que no nos vuelva a sorprender, en el ámbito escolar, una calamidad semejante.
Pues bien, para reflexionar sobre esta y otras cuestiones, la Secretaría de Planeación del Colegio de Ciencias y Humanidades organizó el Congreso sobre Investigación Educativa en el Aula desde la Experiencia Docente, con el objetivo de “compartir y difundir la investigación educativa realizada desde la experiencia del docente en el aula, durante el periodo de confinamiento y su vinculación con el retorno a las clases presenciales”, bajo las siguientes temáticas: Prácticas docentes virtuales y presenciales, Identidad docente, Tecnologías de la información y la comunicación en el contexto de las clases presenciales y Nuevos escenarios docentes: de lo virtual a lo presencial; para lograrlo, se contó con 8 conferencias magistrales y 21 ponencias, presentadas entre los días 24 y 26 de mayo, a más de 200 docentes inscritos.
El Congreso sobre Investigación Educativa en el Aula desde la Experiencia docente es, sin duda, un evento muy oportuno para hacer memoria sobre las prácticas escolares en el pasado inmediato, pero también porque aportará iniciativas y propuestas para enfrentar los retos que, como Colegio, emprenderemos en la revisión y ajuste de los Programas y el Plan de Estudios, a partir del próximo semestre.
Muchas felicidades a las y los organizadores y participantes en este congreso. Les deseamos el mayor de los éxitos, “y que por nuestra raza hable el espíritu”.
Dr. Benjamín Barajas Sánchez
Director General del Colegio de Ciencias y Humanidades
