ETE: Educación y Desarrollo Infantil

ETE: Educación y Desarrollo Infantil

El juego y el canto son estrategias clave en el proceso de aprendizaje

ETE: Educación y Desarrollo Infantil
El juego y el canto son estrategias clave en el proceso de aprendizaje

Las y los alumnos que deciden cursar el plan piloto del Estudio Técnicos Especializado (ETE) de Educación y Desarrollo Infantil aprenderán sobre qué conocimientos deben tener y desarrollar los infantes desde los 40 días de nacidos hasta los seis años, además de establecer su vinculación con el trabajo del sector educativo, ya que, en la actualidad, muchos niños ingresan a temprana edad, comenzando por las estancias infantiles.

Nohemí Espinoza Velez, docente de esta asignatura, explicó que los alumnos que deciden cursarla “aprenden técnicas para potenciar el aprendizaje de los niños por el camino del juego y el canto, porque son las vías de comunicación reales para contactar con los menores, ya que por medio de estas herramientas didácticas podemos dar cuenta de cómo va su proceso de evolución cognitiva”.

Además, ayudan a descubrir problemas motores o de otro tipo cognitivo, aplicando valoraciones acorde a las edades de los menores en compañía de los padres de familia y para lograr una retroalimentación más integral.

Estos conocimientos y otros que pueden adquirir en el ETE se dividen en los módulos: I. Antecedentes de la educación inicial y preescolar en México y bases teóricas del desarrollo infantil; II. Nociones básicas de la didáctica y de la estimulación temprana; III. Desarrollo infantil del lactante; IV. Desarrollo infantil en la etapa materna, y V. Desarrollo infantil en la etapa preescolar.

La maestra del plantel Sur señaló que estos conocimientos los podrán aplicar en las prácticas profesionales, y uno de los requisitos es que los estudiantes deben de cumplir un tiempo de 240 horas en el periodo interanual.

También deben aprobar satisfactoriamente los dos semestres de la opción para tener derecho a las actividades prácticas en un centro educativo, por ejemplo, en un Centro de Integración Infantil (Cendi).

Al cursar Educación y Desarrollo Infantil, los jóvenes también redescubren muchos de los conocimientos que le ha otorgado el Colegio por medio de su Plan de Estudios; asimismo, al aprobarlo, tienen la posibilidad de buscar un empleo con la constancia que les ofrece el CCH para apoyarles en los estudios superiores.

Cabe resaltar que este ETE “está pensado tanto para chicas como para los chicos interesados en el desarrollo infantil y también es importante la presencia de los hombres, pues la figura del varón en los primeros años de vida de los niños es fundamental para un buen desarrollo psicosocial y afectivo”, y porque los padres de familia se encuentran ocupados de tiempo completo en los trabajos, refirió Espinoza Velez.

“Me animé a cursar el ETE de Educación y Desarrollo Infantil, entre otras razones de formación integral, porque quiero aprovechar al máximo todos los apoyos académicos que me ofrece el Colegio y que otras instituciones educativas no tienen para sus alumnos”, declaró Dana Mariana Aguirre Bravo, de 17 años.

La alumna de sexto semestre consideró que le ha gustado lo aprendido, sobre todo, lo relacionado con el tema de la estimulación temprana, porque es importante fortalecer esa parte en la infancia y para que conforme vayan creciendo los niños, no les cueste trabajo adaptarse al entorno de aprendizaje y social que les espera.

“Creo que es importante atender la educación de los niños desde la infancia para fortalecer sus conocimientos y detectar a edades tempranas las limitaciones que tengan, para brindarles atención oportuna con acciones y estrategias de trabajo de acuerdo con el problema por resolver”.

Además, comentó que está ansiosa por poner en práctica los conocimientos y aprendizajes que adquirió, pues esto le servirá para aplicarlos de acuerdo con las situaciones y problemáticas que se nos presenten.

Por su parte, Ingrid Peña Sánchez, de 18 años, dijo que “desde pequeña me llamó la atención del cuidado y desarrollo de los niños y al ver que el CCH ofrecía estos estudios, no dudé en cursarlos de manea extracurricular”.

Agregó que el aprendizaje de los módulos ha sido teórico y práctico, con énfasis en el juego y el canto como recurso didáctico en relación con las etapas de los niños, aspecto que le ha gustado mucho por ser dinámico.

El ETE de Educación y Desarrollo Infantil, además de saberes, la hizo darse cuenta de sus intereses profesionales, entre ellos están ingresar a la carrera de Pedagogía, con una especialidad en educación preescolar.

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