Con el propósito de generar un acercamiento con los jóvenes cecehacheros y reflexionar en torno a situaciones y problemáticas sociales que acontecen en nuestra actualidad, la Comisión de Género del plantel a través del vínculo con He4She Tlalnepantla, ha contemplado a lo largo del semestre una serie de pláticas informativas que abordan temas como equidad de género, derechos humanos, prevención de la violencia, discriminación, entre otros.
La intención, señaló Hassibi Romero Pazos, integrante de la Comisión de Género local, es sensibilizarlos y concientizarlos frente a estos temas para que a su vez sean ellos transmisores de la información en sus entornos inmediatos y poco a poco se generen cambios en los estilos de vida.
El 31 de octubre, tocó el turno para hablar sobre las Nuevas Masculinidades con Joao Hernández, psicólogo egresado de la FES Iztacala y parte del equipo de trabajo del Centro de Integración Juvenil del municipio de Tlalnepantla de Baz. La charla estuvo enfocada en explicar este concepto y compararlo con la idea tradicional que se tienen con respecto a qué es ser hombre.
En primer término, apuntó que el rol de género, es decir, cómo debe ser un hombre o una mujer, se trata de construcciones sociales que pasan de generación en generación, “pensamos que sólo hay una forma de ser hombre pero, en realidad, hay muchas; el ser hombre o ser mujer implica diferentes rasgos e experiencias que debemos visualizar”.
Aclaró que así como surgió un movimiento feminista a favor de la igualdad y defensa de los derechos de las mujeres, también desde los años 80 se empezaron a crear los primeros colectivos de hombres y círculos de reflexión para tratar temáticas como el significado de ser hombre y su relación con el contexto, es decir, la relación con otros hombres; con las mujeres y, en particular, el tema de la violencia.
Desde hace unos años, se ha iniciado a usar conceptos como masculinidades alternativas o nuevas masculinidades que “proponen replantear la idea de masculinidad y desprender los roles de género adquiridos durante toda la vida y perpetuados a lo largo de siglos”.
Bajo esta idea, se promueve también el sabernos, hombres y mujeres, como seres completos, “debemos dejar atrás la idea de que somos seres incompletos que debemos buscar nuestro complemento o media naranja, nos vemos como seres completos plenos y felices que podemos vivir la experiencia de relacionarnos con los demás de una manera saludable”.
Para promover la reflexión entre los asistentes a la charla virtual, Joao Hernández, actualmente colaborador en el programa Prevención comunitaria del Centro de Integración Juvenil, precisó “hablar de nuevas masculinidades no quiere decir que pugnamos por ser adversarios de las mujeres, sino contribuir de manera positiva para tener mejores relaciones y vivir en armonía”.
Agregó que tanto en el movimiento feminista como las nuevas masculinidades se promueve el autoconocimiento y la responsabilidad afectiva, vivir de manera libre y plena con respeto hacía uno mismo y hacia los demás, se busca repensar esas formas de comportarnos como hombres y como mujeres.
De manera breve hizo un recuento de las características de una masculinidad tradicional, entre ellas, señaló el machismo; el vivir siempre en un ambiente de competitividad con otros hombres; la agresividad como la manera de resolver los problemas, el reprimir emociones y sentimientos de tristeza, dolor, ternura; mostrarse superior a las mujeres y tener el control, aunque para ello, se deba ser violento.
La propuesta de las nuevas masculinidades, finalizó, es trabajar de manera preventiva para evitar situaciones de violencia, promover relaciones armónicas y la crianza positiva, apuesta por una cultura del autocuidado de la salud, tanto física como emocional, de los hombres; fomentar la empatía y la libertad de buscar ayuda con especialistas en el caso de requerirla; que cada hombre sea libre de asumir su masculinidad de acuerdo a su personalidad y la visión que tenga de su vida; recurrir a materiales como foros, videos o series que nos ayuden a crecer personalmente, todo ello con la finalidad de lograr relaciones más equitativas para una mejor convivencia.
