El CCH fue una experiencia que repetiría al 100 por ciento; aprendí de mis maestros y de mis amigos que estuvieron al lado mío ayudándome tanto en las buenas como en las malas, expresó José Jesús Tapia Hernández, alumno del plantel Azcapotzalco, quien finalizó su bachillerato con 10 de promedio.
“No tengo palabras para describirlo, hasta que uno mismo lo vive y te das cuenta de todo lo que puedes encontrar, y ves la vida de diferente manera”, agregó el estudiante de excelencia académica.
Al principio, recordó, vivió la incertidumbre de ser o no aceptado en el Colegio y después con lo difícil que fue la pandemia; sobre todo, al no saber qué iban a hacer; “salí de la secundaria con buen promedio y quería mantenerlo, lo logré y esto me ayudará para la carrera que estudiaré. A pesar de que estuvimos casi dos años en línea por la pandemia, me dejó muchas experiencias”.
La pandemia nos destruyó, pero a pesar de esto, en el último año los estudiantes pudimos convivir, de hecho, nos pudimos acoplar muy bien los dos años previos en línea, pudimos tener interacción, destacó.
Al referirse a los profesores, señaló que son muy buenos. “Diría que son excelentes, porque además del aprendizaje, te forman como persona. Cada vez que vas avanzando te das cuenta de que todos esos aprendizajes después te servirán, te hacen más disciplinado, es como si te fueran preparando para lo que viene”.
Sobre cómo lograr un promedio de excelencia, el joven destacó que no todo es fácil, hubo días en que tuvo que decidir entre salir con los amigos o quedarse a hacer un ensayo; en algún momento se sintió demasiado cansado por la carga de trabajo de los docentes, pero después vio que todo valió la pena.
“Cada maestro lleva su ritmo, sólo es adaptarte a su forma de aprendizaje y cuando te adaptas y hay disciplina ves como todo después te sirve”, afirmó.
Respecto a las próximas metas que se tiene planeadas, está la de convertirse en un gran médico ya que le gusta ayudar a los demás, y siente una gran satisfacción de poder facilitarle la vida a alguien.
Ante el arribo de la nueva generación de estudiantes, José Jesús los invita a que disfruten todo lo que les ofrece el Colegio, hasta lo más mínimo; no claudicar si se encuentran con maestros con los que sientan que se acaba el mundo, pues se acoplarán.
Y finalizó expresando que le gustaría que su generación fuera recordada como aquella que, a pesar de dos años sin verse más que a través de una pantalla, supieron sobresalir en varios proyectos.
