Promovemos actitudes violentas, denigrantes y carentes de ética cuando decimos que el feminismo no es una teoría política, sino el discurso violento de mujeres que odian a los hombres, expuso la profesora Maharba Annel González García, en su conferencia: “El feminismo y la necesidad de comprenderlo en su justa dimensión”.
Este concepto, de acuerdo con la teoría de Samara de las Heras Aguilera es “un pensamiento y práctica social, política y jurídica, que tiene por objetivo hacer evidente y terminar con la situación de opresión que soportan las mujeres y lograr así una sociedad más justa que reconozca y garantice la igualdad plena y efectiva de todos los seres humanos”.
Entonces, el feminismo cuestiona la desigualdad que hay entre hombres y mujeres debido a las “debilidades” biológicas de estas últimas, como la menstruación, el embarazo o la menor fuerza física. Lo anterior sostiene que, como la mujer es inferior al hombre, no sería apta para aprovechar las mismas oportunidades de desarrollo que el hombre, y debe permanecer en el ámbito doméstico, al cuidado de la casa y la educación de los hijos.
Y como estas desigualdades se volvieron normas o principios institucionalizados, se considera entonces un “privilegio femenino” el ser mantenida y tener un “trato galante”; por esta razón, la mujer se convierte en el principal defensor y transmisor de la ideología patriarcal; además de formar parte de la llamada “mística de la feminidad”, la cual pone de manifiesto la exclusión de las mujeres del mercado laboral y la mano de obra gratuita en el trabajo doméstico. La profesora remata diciendo que es el sistema ideológico, social, político y económico, denominado patriarcado, el que ha hecho posible las relaciones de desigualdad entre hombres y mujeres. Asimismo, conocer los ejemplos de opresión a los que nos vemos sometidos, permite buscar conductas que nos alejen de dicha opresión.
Maharba González, añade que es imperativo cuestionar, pensar, investigar la información que tenemos antes de repetirla; además de conocer y comprender en “qué consiste el feminismo y cuáles son las conductas que de esa teoría pueden desprenderse, para evitar conceptualizar en nombre del feminismo cualquier serie de adjetivos o de prácticas que están distantes del respeto a los derechos de las personas”.