Hacer matemáticas es un proceso muy complejo, que se puede impulsar cuando logramos convencer a los chavos de que las matemáticas son divertidas y pensar es un placer, entonces el programa se va como agua, porque echamos a andar su cerebro, mostrándole que las matemáticas son razonar, pensar, crear, inventar y discutir, aseguró el profesor Francisco Struck Chávez.
Y es que para él, los tres meses que se tardan en enseñarles a sumar quebrados, lo van a hacer en una tarde, una vez que comprendan que detrás de todo hay una lógica y que la pueden entender.
Para el reconocido docente, se pueden hacer algunos cambios sin dejar de luchar por hacer un programa de estudio más adecuado, por ejemplo, en la Facultad de Ciencias los programas se hicieron en 1966, antes de que se inventaran las computadoras y cómo han cambiado las matemáticas desde entonces, afortunadamente los maestros ya enseñan otras cosas y se han agregado materias de computación.
Lo más importante, sostuvo, es librar a las y los jóvenes del tedio, enseñándolos a usar bien una computadora, para que haga la talacha, como lo hacen en otros niveles, para que ellos piensen y creen, de crear.
Por eso, la enseñanza de las matemáticas debe partir de cinco axiomas, que son: que los alumnos son inteligentes y deben ser tratados como tales; que las personas inteligentes se interesan por cosas interesantes, por lo que si queremos que los alumnos se interesen debemos darles cosas interesantes.
Para Struck, quien participó en el primer “Foro de Experiencias Docentes en Educación Matemática” del Colegio, los profesores que dan matemáticas también deben considerar que: a nadie le interesan las respuestas a preguntas que nunca se ha hecho, por lo cual, y es el cuarto axioma, a lo primero que están obligados los maestros es a hacer que los jóvenes tengan una duda que ellos como profesores puedan resolver.
Y finalmente, pero no menos importante, dijo, es que como docentes no pueden enseñar algo que no saben, ni hacerlo bien si la materia no les gusta.
Luego, el matemático y profesor en Ciencias preguntó cómo es que se resuelven los problemas de la vida diaria, “se resuelven no con fórmulas, sino con ingenio, con tesón, con paciencia, con entusiasmo, con coraje, con valor, con cualidades humanas y esas no aparecen en los programas de estudio; a veces, afortunadamente, hay profesores que las meten, pero en general en los programas de estudio no aparecen”.
Durante el evento, se consideró valioso retomar temas como la Educación matemática, donde se reconoció que el nivel es bajo y habría que tomar medidas para elevarlo.
Modelación Matemática, en el que se hizo la diferencia entre modelización, modelado o modelaje y modelación, se le definió como el estudio de fenómenos no matemáticos, mediante el planteamiento de un modelo matemático que facilite su comprensión. Para llevarla al aula, en especial al bachillerato, es necesario hacer una simplificación de los procesos, pues el tema es muy complicado.
Sobre Evaluación, se comentó que está relacionada con la investigación educativa, en tanto la primera se conciba como una recolección de evidencias del funcionamiento de la clase y éstas sean analizadas, a fin de detectar y resolver problemas sobre su desarrollo.
También discutieron el fomento de valores como el respeto, la tolerancia, la cooperación y la solidaridad desde el aula matemática, se coincidió en que se debe predicar con el ejemplo y se mencionó la posibilidad de abordar ejemplos ajenos al contexto escolar que traten problemas sociales o ambientales para sensibilizar al estudiante en temas como la equidad de género.
Mientras que en materia de Formación de Profesores, se debatió en torno a la posibilidad de conformar un programa que sea un espacio de reflexión sobre la labor y el valor del trabajo docente, que se realiza en el Colegio.
