A los jóvenes se les debe brindar una educación integral en materia de sexualidad, que ofrezca a todos y todas los conocimientos y competencias necesarios para tomar decisiones conscientes, sanas y responsables sobre las relaciones y la sexualidad, propuso Mallinali Mejía Islas, creadora del sitio Malicia Sexual.
En la charla “Entre prohibiciones y obligaciones: la educación sexual de las mujeres”, organizada por la Comisión de Género del plantel Azcapotzalco para orientar a los estudiantes sobre diversos temas de los que les es difícil preguntar, Mejía recordó que habitualmente la educación sexual se limita a anticonceptivos e infecciones de transmisión sexual.
En cambio, explicó, una educación integral se centra en la adquisición de competencias prácticas y conocimientos científicamente precisos y completos, comienza en la enseñanza primaria con contenidos adecuados para las distintas edades y va incorporando temas gradualmente a medida que los jóvenes se desarrollan.
Aborda el desarrollo humano en cada etapa de la vida, tomando en cuenta las dimensiones físicas, psicológicas, sociales y espirituales, además ofrece a los jóvenes la oportunidad de reflexionar de manera crítica sobre el género y la función que desempeñan en su cultura y su sociedad, pone énfasis en la tolerancia, la no violencia, el respeto, la igualdad y la empatía; ayuda a forjar valores, actitudes y decisiones sobre las relaciones y, en su momento, relaciones sexuales saludables.
Con estos conocimientos y estas competencias para la vida les resultará más fácil tomar decisiones conscientes sobre su sexualidad, “es un hecho que la educación integral en sexualidad de calidad ayuda a retrasar su primera experiencia sexual, contribuye a prevenir el VIH, las infecciones de transmisión sexual y los embarazos no deseados”, aseguró.
Licenciada en Ciencias de la Comunicación y en Psicología por la UNAM, con un diplomado en terapia cognitivo conductual, Mejía se dedica a la Educación Integral de la Sexualidad, brinda orientación, consejería, charlas y talleres para que las personas puedan vivir su sexualidad de manera libre, saludable, responsable y placenteramente.
