Visita de la comisión de género del IIMAS

Visita de la comisión de género del IIMAS

Los cursos apoyan a niñas y adolescentes

Visita de la comisión de género del IIMAS
Los cursos apoyan a niñas y adolescentes

Adquirir el pensamiento computacional y usarlo como herramienta para la resolución de problemas, no sólo de matemáticas, sino de la vida cotidiana, es de suma importancia; asimismo, es necesario incorporar a un mayor número de mujeres en carreras del área científica, pues la ciencia requiere de la visión femenina, aseguró la doctora Mónica Vázquez Hernández.

Esto durante la visita de la Comisión Interna para la Igualdad de Género (CInIG), del Instituto de Investigaciones en Matemáticas Aplicadas y en Sistemas (IIMAS) de la UNAM, para informar a las y los estudiantes.

Vázquez Hernández junto con Israel Sandoval Grajeda, ambos pertenecientes al IIMAS, apuntaron que la perspectiva desde la mujer enriquece el ámbito científico, haciéndolo mucho más plural, y ayuda a la detección de sesgos y estereotipos de género.

Como CInIG del Instituto “promovemos esta reflexión y colaboramos para que desde niñas se forme otra mentalidad que les permita tener de opción las áreas científica y tecnológica; es un hecho que entre más temprano tengan este acercamiento, mayores serán las posibilidades de involucrarse en ellas”, mencionó la doctora.

El maestro en Ciencias de la Computación agregó que esta instancia organiza diversos cursos para niños, niñas y adolescentes relacionados con el desarrollo del pensamiento computacional, el cual tiene características muy particulares, como las capacidades de abstracción y de análisis del entorno del problema. Pero, sobre todo, en el uso de herramientas para modelar el mundo en sistemas de cómputo e interactuar a través de los mismos.

Los cursos promueven un pensamiento crítico para que las y los participantes se cuestionen y argumenten, que busquen profundizar con lógica e imparcialidad, y apliquen estas destrezas cuando leen, escriben y hablan. “Lo que se busca es que también sean libres a la vez, porque muchas de las cosas que suceden en nuestro entorno están predeterminadas por personas totalmente ajenas a nosotros”.

Explicó que son tres áreas del conocimiento donde se pone en práctica el pensamiento computacional: la lógica, la resolución de problemas y la construcción de algoritmos. Sus aplicaciones van desde las matemáticas hasta situaciones de la vida cotidiana.

Respecto a la aceptación de los cursos, cada vez más niñas se integran a ellos, hay mucha disposición de su parte. “El pensamiento computacional es un área transversal que permite eliminar estereotipos de género”, concluyó Sandoval Grajeda.

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