Un total de 126 proyectos de investigación elaborados por profesores del Colegio de Ciencias y Humanidades de las cuatro áreas del conocimiento y de los cinco planteles, junto con sus estudiantes, son tan sólo una muestra de los trabajos en los Laboratorios Avanzados de Ciencias Experimentales (LACE) y de Creatividad (CREA) del Siladin; sus alcances, resultados y prospectivas se compartieron a la comunidad docente en la Muestra Siladin 2023-2024.
Los objetivos de dicha actividad fueron presentar las distintas experiencias, fomentar y fortalecer el trabajo experimental en el aula, en particular, como aspectos centrales para la enseñanza de la física, la química, la biología y de todas las áreas; además de ampliar la cultura científica de los estudiantes y orientar sus vocaciones hacia estos sectores, detalló Taurino Marroquín Cristóbal, secretario de Servicios de Apoyo al Aprendizaje del CCH.
Asimismo, explicó, es un espacio para proponer formas de trabajo y organización entre los profesores de manera que se favorezca la optimización de espacios y recursos; de fomentar la cultura del uso adecuado, el cuidado y la seguridad respecto a equipos, sustancias y materiales de laboratorio realizando tratamiento de residuos generados durante la actividad experimental.
Ante directivos del CCH, profesores y estudiantes, el funcionario destacó que “con el tiempo se han formado proyectos interdisciplinarios e interáreas, hecho que ha favorecido la educación integral en los jóvenes estudiantes”. Además, comentó que son actividades extracurriculares, “lo que nos indica que los alumnos se acercan a trabajar en sus instalaciones convencidos de manera formal en el aprendizaje y la vocación hacia las ciencias desarrollando habilidades”.
Al respecto, Adriana Hernández Ocaña, jefa del Departamento de Siladin Central, indicó que la Muestra celebra el conocimiento, la investigación y el aprendizaje; “hoy comparten descubrimientos, ideas y proyectos creativos e innovadores que reflejan el esfuerzo y dedicación de nuestros estudiantes y académicos”. Deseó que con esta experiencia muchos académicos y estudiantes se animen a ser parte de los proyectos Siladin, o se inspiren para llevar a cabo uno nuevo, concluyó.
Una parte del Siladin
Algunos de los trabajos que se presentaron en la primera jornada, de las dos que conformaron la Muestra, fueron “Alimentación sostenible ¿La alternativa a una crisis alimentaria?”, a cargo de los maestros Alejandro López Álvarez, Lenin Vargas Muñoz y Karen Ocampo Álvarez, del plantel Azcapotzalco.
Su investigación se centra en una propuesta de alimentación para la población juvenil de ese centro educativo, a partir de elaborar una harina balanceada con cáscaras de fruta, semillas y proteína vegetal, para aprovechar los residuos agroindustriales en la generación de alimentos.
Mauricio Bravo Calvo, del plantel Naucalpan, presentó “Experimentación con ayuda de sensores en física”, quien explicó que dichos recursos se encuentran en los laboratorios del Colegio desde hace más de 25 años, pero no se ha generalizado su uso.
Sobre sus ventajas, señaló que facilita la toma de datos de manera más precisa y rápida, hace el registro simultáneo de dos o más conjuntos de valores y permite más tiempo para el análisis, posibilita el repetir el experimento y observar a detalle el proceso, entre otros.
Por otro lado, el maestro Carlos Galindo, del plantel Vallejo, compartió su proyecto “Obtención de extractos de plantas por destilación”, el cual busca capacitar a los estudiantes en el manejo adecuado de técnicas de análisis, medidas de seguridad e higiene, en materiales y equipos de laboratorio, a partir de extraer principios activos de plantas con la finalidad de utilizarlos como inhibidores del crecimiento bacteriano.
Los principios activos, dijo, son sustancias con actividad biológica que tienen la capacidad de interactuar con nuestro organismo y sus distintos sistemas, la mayoría de estos son estudiados y utilizados por la industria farmacéutica.
Las profesoras Pilar Rodríguez Arcos y Cecilia Espinosa Muñoz, del plantel Oriente, presentaron los objetivos y acciones del “Club de Química. Desarrollando habilidades científicas”, que tiene más de 20 años de fomentar vocaciones en el Área de las Ciencias Experimentales.
El Club fomenta en los alumnos habilidad para ser partícipes de su propia educación, también en la indagación documental y la investigación experimental, se les fomenta la creatividad y sean capaces de proponer y reinventar.
Más adelante, Magali Jazmín Estudillo Claveria, Pavel Castillo Urueta y Nohemí Claudia Saavedra Rojas, docentes del plantel Sur, expusieron su proyecto “Huerto escolar Mayahuel, una propuesta de desarrollo sustentable”, el cual tiene el objetivo de concientizar a los estudiantes sobre la urgencia de adoptar prácticas más sostenibles y respetuosas con el ambiente en la producción de alimentos.
Entre sus acciones, están la siembra de semillas en almácigo para después trasplantarlas en el huerto; se preparó y aplicó repelente orgánico para insectos y fertilizante orgánico; además, se llevó a cabo un taller de cocina sustentable y nutritiva.
Otro trabajo fue “Pirólisis... la solución más hot”, que presentaron los profesores Sherlyn Xiomary Gutiérrez Santana, Jesús Erick Matías Arévalo, Jorge Luis Arpide González y Cedric Jiménez Cerón, quienes a partir de la problemática de la excesiva producción y mal manejo de plásticos que provoca contaminación en mares y ríos del planeta, proponen que a partir de estos se produzca biocombustibles.
Para ello, se basan en la pirólisis, proceso térmico que degrada materias orgánicas e inorgánicas, el cual alcanza temperaturas entre 400 y 800 grados, no libera contaminantes y es un proceso muy rentable. Se trata de construir un prototipo a escala de un reactor pirolítico.
