Frente a la posibilidad de sufrir alguna crisis en seguridad, salud, desastre natural, entre otras, la cultura de la prevención y el autocuidado, acompañada del trabajo en conjunto de toda la comunidad del Colegio, del saber cómo actuar y mantenerse informados, permitirá dar continuidad a las labores educativas, destacaron Héctor Baca Espinoza y Marcos Martínez de Blas, secretarios de Comunicación Institucional y de Atención a la Comunidad del CCH, respectivamente, al presentar los Protocolos de Atención y Prevención Comunitaria.
Lo anterior, con el propósito de contrarrestar los riesgos por contingencias a través de la prevención, mitigar los efectos de la violencia y de los actos delictivos, de manera que se salvaguarde la integridad de la comunidad universitaria, y se dé continuidad a las funciones académicas y administrativas, explicó Baca Espinoza.
Para ello, indicó, es necesario que se continúe trabajando de la mano, Dirección General y los cinco planteles, en difundir las acciones, los aspectos preventivos y los riesgos que pueden tener los jóvenes.
Se ha tenido buena recepción de los protocolos, señaló, y amplia difusión en la Gaceta CCH y en los planteles; alrededor de “tres millones vieron la información que tiene que ver con el autocuidado, temas de género y acciones durante la cuarentena”, detalló.
Informó que se tienen protocolos de acción para situaciones de violencia, qué hacer en caso de incendio, fugas de gas, sismo, urgencias médicas, y se han agregado prevención de adicciones, de violencia de género y cómo detectar y atender casos de Covid-19.
“La comunidad tiene que atender estas problemáticas, el compromiso es de todos”, reconoció Martínez de Blas durante su intervención.
Destacó la importancia de reconocer las situaciones que se pueden suscitar, para después ser empáticos y tratar de ayudar al otro, y a partir de ello, que surja el germen de la solidaridad. Finalmente, llamó a trabajar en equipo para cada eventualidad.
