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La Universidad Nacional Autónoma de México está celebrando los cien años de su escudo y lema, los cuales simbolizan la libertad, la identidad, la autonomía, el orgullo, el sentido de pertenencia, el pluralismo y el arraigo de quienes formamos parte de esta gran comunidad.

El escudo de nuestra Universidad, como todo lo que sucede en ella, ha evolucionado y el que hoy ostentamos, representa la octava versión, la cual fue concebida por José Vasconcelos el 27 de abril de 1921, cuando el Consejo de Educación Pública aprobó el último cambio a este escudo y el lema POR MI RAZA HABLARÁ EL ESPÍRITU.

La Universidad Nacional representa un proyecto educativo fundamental del pasado, el presente y el futuro de México. Tiene un papel preponderante en la historia y desarrollo del país, resultado de su trascendente trabajo educativo, de investigación y de divulgación del conocimiento y la cultura.

Sin embargo, la UNAM es mucho más que esto, pues es una institución educativa pública, laica y gratuita que tiene una permanente vinculación con la sociedad mexicana. Trabaja, promueve y brinda información en diferentes campos del conocimiento y presta servicios diversos en los ámbitos de la salud, la cultura, la ciencia, la tecnología, el arte, las humanidades, la política, el deporte y el ambiente, entre otros, lo cual da cuenta de su fortaleza y de su trascendencia.

En la UNAM se imparten más de 26 mil clases diariamente a 360 mil alumnas y alumnos, en los niveles de bachillerato, licenciatura y posgrado, además, su amplio programa de educación continua ha beneficiado solamente en lo que va del año 2021 a casi 790 mil personas, con la impartición de 5,890 actividades como talleres, cursos y diplomados, entre otras.

Adicionalmente, se estima que en sus laboratorios y demás espacios, se realiza alrededor del 50 por ciento del total de la investigación científica que se hace en el país.

Es un espacio de libertades, donde no importan condiciones tales como la posición económica, la raza y la religión. Se respeta la orientación sexual de las personasy se refuerzan las acciones para lograr la igualdad de género. Por supuesto, también se cultiva el espíritu crítico y se proponen soluciones a los grandes desafíos nacionales.

La Universidad Nacional, como institución pública de enseñaza, es el instrumento de capilaridad social mejor diseñado. De sus licenciaturas se han titulado y graduado cientos de miles de profesionistas. A sus aulas, laboratorios y demás espacios han llegado miles de estudiantes de todos los rincones de México y de varios países latinoamericanos, orgullosos de ser la o el primer miembro de la familia en ingresar a la Universidad. Ellas y ellos son ciudadanos de bien, con valores arraigados, que ven por su familia y su país. Quienes vienen de otras naciones, al concluir sus estudios, retornan a sus lugares de origen a aplicar y compartir sus conocimientos.

En el ámbito educativo, la UNAM ha sido modelo e inspiración en el diseño, creación, fortalecimiento y desarrollo de diferentes universidades públicas y privadas de México. Con el sector educativo privado, la Universidad de la Nación también trabaja todos los días mediante la impartición de cursos, talleres, asesorías, trabajos de investigación colaborativos y demás actividades.

Un total de 335 instituciones educativas, de 27 entidades federativas, que forman a decenas de miles de estudiantes, están incorporadas a la UNAM y con ello hacen suyos no solamente sus diferentes planes de estudio de bachillerato y/o licenciatura, sino también las actividades de evaluación y seguimiento que permiten asegurar un nivel académico de calidad de sus profesores y alumnos.

Por las aulas de la UNAM ha pasado y egresado eminentes personajes, hombres y mujeres, líderes en su campo, como los tres Premios Nobel que México ha dado al mundo, Alfonso García Robles, Octavio Paz y Mario Molina, además de otras emblemáticas figuras que han dado prestigio a México a lo largo de la historia en todos los campos del conocimiento, de las artes y de la cultura.

Durante los momentos más complejos para el país y su población, la Universidad siempre ha estado presente de forma activa. La comunidad universitaria siempre brinda su ayuda a la población en situaciones de emergencia y desastres que han afectado gravemente a los mexicanos, como son los sismos y los huracanes.

Durante la contingencia sanitaria por la que atravesamos ahora, la UNAM ha sumado su conocimiento, talentos y capacidades a los esfuerzos nacionales. Se incluyen sus aportaciones en investigación biomédica, en el diseño de equipos y dispositivos médicos, en atención médica, así como en ayuda psicológica, económica, contable, administrativa, jurídica y de género, entre otras múltiples acciones.

En su quehacer cotidiano, la UNAM presta servicios invaluables y facilita las más diversas actividades culturales de manera accesible a todas las esferas sociales. Por ejemplo, la institución es la encargada de albergar la Biblioteca y la Hemeroteca nacionales, donde se atesora la historia de este país. Opera además el Servicio Sismológico Nacional y la Red Mareográfica Nacional, y ahora, en su nuevo Pabellón Nacional de la Biodiversidad, estudia la viabilidad de la vida futura en el planeta y resguarda diversas colecciones nacionales que permiten entender más de la flora y la fauna de nuestros ecosistemas.

Además, pone a disposición de toda la población mexicana sus museos, orquestas, cines, y teatros, así como su gran oferta editorial que es la mayor de Latinoamérica, al editar en promedio tres títulos diferentes cada día. A sus diversos recintos culturales acuden más de 3 millones de personas cada año. También, la Universidad representa un semillero de nuevos valores deportivos que participan en competencias nacionales e internacionales, incluyendo los juegos universitarios, panamericanos y olímpicos.

Por todo lo anterior, y mucho, mucho más, la UNAM es la Universidad de la Nación. Crisol de orgullo, dignidad, esfuerzo, compromiso e identidad. Por tanto, por todo esto y más, es muy significativo que estemos hoy celebrando en este recinto universitario, la Ceremonia de Develación del Billete Conmemorativo de la Lotería Nacional para la Asistencia Pública, por los 100 años del actual escudo y lema de la UNAM, el cual dice: POR MI RAZA, HABLARÁ EL ESPÍRITU.

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