El mérito del británico va más allá del tema de la evolución

Defensor del darwinismo

El mérito del británico va más allá del tema de la evolución

Defensor del darwinismo
El mérito del británico va más allá del tema de la evolución

El Seminario Universitario de Historia, Filosofía y Estudios de las Ciencias y la Medicina (Suhfecim) de la UNAM organizó una serie de conferencias para conmemorar el 200 aniversario del nacimiento de Alfred Russel Wallace, un naturalista extraordinario, complejo y reconocido por la relación de su obra con las teorías de Charles Darwin.

Juan Manuel Rodríguez Caso, de la Facultad de Ciencias de la UNAM, impartió la charla sobre Alfred Russel Wallace (8 de enero de 1823- 7 de noviembre de 1913), a quien consideró “un naturalista diferente a los de su época, tuvo mucha importancia en su tiempo y ganó reconocimientos posteriormente. Fue uno de los personajes que más aportó a nuestro conocimiento sobre la evolución y la selección natural, sobre biología, antropología y otras áreas”.

Apoyado por varias biografías, el también doctor por la Escuela de Filosofía, Religión e Historia de la Ciencia en Reino Unido afirmó que algunas obras aún llevan a pensar a Wallace en función de Darwin y esa no es la idea. “Creo que solito tiene los suficientes méritos para ser reconocido por sus propios trabajos y trayectoria”.

Sobre su libro Darwinismo, publicado en 1889, precisó que es uno de los varios ejemplos de los trabajos que Wallace desarrolló respecto a la selección natural; “esta obra lo consolidó como el auténtico defensor y difusor de la teoría de la selección natural, en él plantea su propia versión de lo que consideraba era el darwinismo”, dijo.

Rodríguez Caso explicó que durante su vida, Wallace fue honesto al reconocer el papel que tuvo Darwin en su obra, pero a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX fue identificado como un auténtico defensor-difusor de la selección natural y evolución, mismas que le valieron una serie de reconocimientos. 

El maestro en Ciencias Biológicas por la UNAM resaltó que en 2010, con motivo del aniversario de la Real Sociedad de Londres, se hizo un listado de científicos y científicas que marcaron los diferentes campos del saber. En esta selección aparecieron Isaac Newton y Charles Babbage en el área de la computación. En el tema de evolución, acerca de quién realizó más aportaciones al estudio y desarrollo de este tema, se elegió a Alfred Wallace.

“A pesar de que se habla de él como padre o fundador de la biogeografía o la zoogeografía, va mucho más allá de estos estudios, porque realizó otros sobre mimetismo y las discusiones sobre evolución sexual, así como su participación en el desarrollo de la antropología y la biología como disciplinas científicas; por algo recibió numerosos reconocimientos”, dijo.

 

Educación y medio ambiente

En otro punto, el doctor comentó que Alfred Russel Wallace fue un crítico del imperialismo y del militarismo: “propuso a los museos como centros educativos. Wallace tuvo una formación básica, estudió hasta los 14 años y por su situación económica tuvo que trabajar; en ese entonces, la educación estaba abierta sólo a quien podía pagarla o a quienes pertenecían a ciertas clases sociales o grupos religiosos”, señaló el investigador.

“A Wallace le preocupaba la educación, deseaba que fuera lo más amplia y diversa posible y era la época en que los museos eran centros de divulgación del conocimiento científico. Llegó a pensar y propuso que estos espacios fungieran como centros educativos, que pudieran servir para que cualquier persona pudiera tener un poco más de educación y cultura”.

En ese sentido, comentó que “alguna de las primeras, si no es que la primera área protegida que existió en Inglaterra, fue el bosque de Epping Forest, al norte de Londres, la cual fue promovida y lograda por Wallace como algo necesario e imperativo ante la situación del avance de la revolución industrial y la contaminación que ya empezaba a notarse en dicho territorio”.

Por ello, indicó que el investigador inglés fue el primero en defender la necesidad de tener estos espacios exclusivos, pues aunque Inglaterra no tiene la misma biodiversidad en comparación con otros países, “nació esta conciencia ambiental”.

Por último, señaló que Wallace fue una persona interesada en su entorno, en la literatura gótica y construyó sus casas con sus respectivos invernaderos y jardines: “Las diseñó y fueron de cemento, cuando se acostumbraban las de madera, lo cual ha hecho que sean duraderas”.

Wallace fue profesor y algunas de las materias que llegó a impartir fue trigonometría; también fue topógrafo, por lo que todo el trabajo con planos era algo que conocía muy bien, además de que destacó en la astrobiología, finalizó Rodríguez Caso.

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