Seguro de que el proceso de investigación desde el aula debe formar parte del quehacer docente, el maestro Homero Flores Samaniego hizo un llamado a sus colegas para que cambien de mentalidad y dejen de pensar que es una actividad sólo para profesores de carrera o reservada para instancias superiores como el posgrado.
En la presentación del curso Introducción a la Investigación Educativa, Flores explicó que formar docentes investigadores de excelencia es uno de los propósitos de esta actividad y del Centro de Formación Continua (CFC) que él encabeza, y desde el cual se impulsa el fortalecimiento disciplinario.
Con más de 20 años dedicado a la formación de docentes, el maestro del plantel Sur les mostró a sus alumnos un adelanto del sitio web de la CFC para que se dieran una idea de la oferta con la cual busca incidir en ellos para volverlos generadores de conocimientos.
De esa manera, expuso, “la labor del docente investigador estará centrada en fomentar en sus estudiantes valores como la tolerancia, el respeto y la cooperación, al tiempo que les dote de un acervo de conocimientos que facilite su inserción en la sociedad como individuos críticos y participativos”.
Por eso, dijo, es necesario hacer una reflexión sobre la investigación educativa en el aula como vehículo para generar conocimiento académico sobre los fenómenos que se dan en el seno de un salón de clase, como parte del aprendizaje de una asignatura o de un grupo de ellas y sobre los requisitos para llevar a cabo este tipo de investigación.
El doctor en Matemática Educativa por el Cinvestav detalló que buscarán establecer un marco de referencia que les ayude a hacer la investigación educativa desde el aula, la idea es empezar desde los fundamentos y hacer una reflexión sobre cuestiones relevantes como qué entendemos como pedagogía y qué diferencia hay entre pedagogía y didáctica, y todo esto cómo repercute en la educación.
Agregó que, si bien es sólo un curso introductorio, que no profundizará en cuestiones metodológicas por falta de tiempo, a lo largo de sus cinco sesiones tendrán que reflexionar sobre aspectos más básicos, como qué es el conocimiento en la sociedad, cómo se genera y valida y cómo se refleja en la docencia.
“Es ver nuestra docencia, nuestra propia educación con ojos diferentes, para abordar la investigación educativa en el aula, desde un punto de vista que nos va a permitir trabajar mejor, por ahí va el curso”, aseguró.
Las expectativas
Tras la exposición de Flores, que incluyó la explicación de los módulos y formas de trabajo, los docentes reconocieron la importancia de fortalecer sus capacidades de investigación y se mostraron interesados en aprender y consolidar conocimientos que puedan llevar a su práctica docente.
Alberto Téllez, del plantel Vallejo, señaló que espera aprender lo más posible para aportarlo a sus alumnos; Elena Plácido, de Oriente, porque quiere llevar de manera correcta las investigaciones que hace con sus estudiantes; Enrique Pimental, de Naucalpan y de la FES Acatlán, por considerar que el tema es fundamental para profesionalizar la docencia.
Laura Pérez, de Azcapotzalco, desea contar con mayores elementos teórico-metodológicos para realizar investigación educativa y publicarla; Elizabeth Del Moral, de la Facultad de Química, adquirir nociones para hacer investigación educativa con los alumnos y redirigir su línea de investigación hacia la educación.
Adriana Rodríguez, de Azcapotzalco, tiene el interés de contar con bases para diseñar y llevar a cabo un proyecto de investigación educativa bien hecho, para cada día mejorar la calidad del aprendizaje de sus alumnos; Isabel Velázquez, de Oriente, busca adquirir herramientas para formalizar la investigación que hace en el aula.
