La UNAM, a través de su Secretaría General y la Coordinación de Universidad Abierta, Innovación Educativa y Educación a Distancia, agradeció a los académicos de la Escuela Nacional Colegio de Ciencias y Humanidades y de la Escuela Nacional Preparatoria el esfuerzo que han realizado para continuar con su labor educativa en tiempos de la pandemia del coronavirus.
Situación que obligó no sólo a esta institución, sino a todo el sistema nacional educativo a migrar a “métodos de enseñanza alternativos, principalmente en la modalidad de educación a distancia vía plataformas electrónicas”, con lo cual se logró evaluar el semestre 2020-2 y el año académico 2019-2020 para aquellas facultades y escuelas que tienen planes anuales, se destaca en la circular SGEN/0165/2020, del 16 de octubre.
El documento, que firman los titulares de la Secretaría General y la Coordinación de Universidad Abierta, Innovación Educativa y Educación a Distancia, Leonardo Lomelí Vanegas y Melchor Sánchez Mendiola, respectivamente, refiere el compromiso de esta casa de estudios de seguir en el acompañamiento y asistencia al docente a través de una serie de apoyos didácticos y cursos en línea a través de la CUAIEED, además de extender los beneficios del Programa PC Puma.
“La Universidad Nacional realizará todos los esfuerzos a su alcance para apoyarlos en esta situación especial para el cumplimiento de los objetivos académicos de sus cursos y también para apelar a su sensibilidad hacia la difícil situación que enfrentan muchos de nuestros estudiantes”.
Lo anterior, se señala en el documento, ante los datos obtenidos por las entidades académicas y en las cuales se observa un porcentaje significativo de estudiantes que carecen de equipo adecuado o conexión estable a internet, y que aunado a que el consumo de datos en videoconferencias es muy alto, ha hecho que “en muchos casos la opción de mantener apagada la cámara permite a los estudiantes ahorrar dinero y mejorar la calidad de la señal”.
Ante esta situación, las autoridades finalizan con un llamado a los profesores para que den facilidades a los “estudiantes que no disponen de equipo adecuado para conectarse con video a las sesiones y permitir a aquellos que sí cuentan con este medio que mantengan apagada la cámara cuando no estén participando en clase si así lo desean”.
