Aun cuando para Óscar Iván Montiel Juárez, alumno del plantel Sur, la lectura de textos filosóficos ha sido un pasatiempo que se acrecentó más durante la pandemia, reconoce que su estudio le ha permitido madurar como persona, ya que ha ampliado su visión sobre lo que quiere ser, particularmente porque esta disciplina provoca una serie de cuestionamientos a los que hay que dar respuesta.
Muchas de esas reflexiones las expuso en un ensayo, que formó parte de las pruebas de la décima Olimpiada Universitaria del Conocimiento 2021, donde obtuvo medalla de oro en el área de Filosofía, cuya prueba, dice, lo hizo conocer diversos textos y a muchos filósofos y sus posturas.
Con algunos coincidía y con otros no; incluso estaba en contra de lo que decían, pero creo que ésto es importante, el poder conocer otras personas que piensan totalmente distinto a ti, ya que te ayuda a argumentar tus ideas, opiniones; “aunque no coincida conmigo, me complementa escuchar a los demás, por lo que fue una gran experiencia participar”, afirma orgulloso.
“Me gusta mucho leer Filosofía y cuando vi la opción de elegir esta área en la Olimpiada, no lo dudé, pues sabía que lo iba a disfrutar mucho. Entre mis libros favoritos están El arte de ser feliz, de Arthur Schopenhauer, y Así habló Zaratustra, de Friedrich Nietzsche, ambos fueron las bases para mi ensayo, y referentes muy importantes para mí”, compartió el estudiante de sexto semestre.
Y es que para él, la filosofía le ha permitido una serie de aprendizajes que ha aplicado en su vida cotidiana, pues cada vez que hace algo se pregunta el por qué de sus acciones, “por qué creo lo que creo, por qué necesito esto o lo otro; es como ir a las bases y no solamente elegir algo en tu vida sino ir a lo más profundo de tu mente y hacer un análisis de uno mismo y de las personas; de tu contexto social y cultural”.
Eso, considera, lo hace ser más honesto consigo mismo, “aunque a veces sea un poco doloroso, o no sea fácil, pero realmente eres tú mismo, ya no eres lo que el mundo o la sociedad te ha dicho que tienes que ser, sino lo que verdaderamente quieres”.
Al referirse al ensayo que expuso en la Olimpiada, comparte que se enfocó en la felicidad y cómo el concepto de Dios y la creación del mundo han hecho que las personas sean egocéntricas, egoístas y megalómanas. “La construcción que hemos hecho de nosotros mismos a partir de Dios no fue una bendición, sino una maldición, porque en lugar de hacernos felices nos hizo infelices, entonces, tenemos que dejar de pensar en la religión para ser felices y hacerlo nosotros mismos”.
El alumno, quien tiene interés por estudiar Ingeniería en Computación o nanotecnología, fue asesorado por el profesor Ricardo González Santana, quien lo orientó en la interpretación de los textos, “aunque me enfocaré al área de las ciencias, definitivamente leer filosofía será un hobby que seguramente será permanente”.
Hoy, Óscar Iván se siente satisfecho al ver que su esfuerzo tuvo recompensa, “la verdad es que es muy grato. Sin duda, invito a mis compañeros a participar en este tipo de pruebas, yo me arrepiento de no haberlo hecho antes, porque es una experiencia totalmente nueva y muy enriquecedora”.
