El Programa Institucional de Tutoría (PIT) coordinó diversas actividades para coadyuvar a la labor del tutorado en el plantel, entre ellas ofreció el taller Sensibilización de la ansiedad, depresión y ataques de pánico, impartido por la profesora María de los Ángeles Cruz Sánchez, quien lo consideró un tema oportuno, dado el contexto de los últimos dos años.
Explicó que, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina, la ansiedad es un sentimiento de miedo, temor e inquietud, que puede manifestar nuestro cuerpo a través de la sudoración y tensión, así como al aumento de palpitaciones.
La depresión, en cambio, es un trastorno mental caracterizado por un bajo estado de ánimo y sentimientos de tristeza, asociados con alteraciones del comportamiento, del grado de actividad y del pensamiento.
En tanto que los ataques de pánico son representaciones del miedo o ansiedad repentina que pueden provocar en las personas una falta de aire o mareos; en esta situación, se puede confundir con un ataque al corazón.
Este tipo de ataques puede durar entre cinco y veinte minutos, dependiendo de cada individuo, acotó la profesora.
Luego habló de algunas diferencias entre los tres conceptos, para poder identificarlos y actuar con mayor certeza frente a la distinta sintomatología, y detalló que cuando uno se siente ansioso, regularmente sufre de una constante preocupación por lo que podría pasar en el futuro; en la depresión, prevalece la tristeza.
Por otra parte, la focalización del tiempo es distinta entre ambos padecimientos, aclaró que alguien con ansiedad sufre una constante preocupación por sucesos del futuro; por el contrario, en la depresión, la tristeza sobresale y se centra en los sucesos del pasado, además de que existe una infravaloración de uno mismo en el presente.
Luego de escuchar a los participantes, Cruz cerró la charla con una actividad para que se haga conciencia sobre el tema.
En caso de padecer alguna de estas situaciones, destacó, es necesario pedir orientación, preferentemente profesional, para que nos ayude a determinar el origen y tomar medidas al respecto, antes de que alguna de estas condiciones detone un problema mayor.
