El proyecto de reproducción de orquídeas ex situ para su preservación fue desarrollado dentro de las investigaciones realizadas en el Seminario de Formación de Profesores de Ciencias Experimentales Naucalpan por la maestra María Patricia Chalico Marcial, junto con sus alumnos, en los invernaderos del mencionado plantel.
Este proyecto consistió en buscar dos formas de reproducción para las orquídeas. El primer caso es por medio de la semilla, tratando de imitar o igualar las condiciones que tienen en el ambiente, es decir, simplemente poner las orquídeas sobre madera, que tenga un simbionte (un hongo) y a partir de ello la semilla pueda germinar para producir una planta.
El segundo caso se realiza con esquejes. Para esto a una planta adulta se le cortan las ramas en secciones y se les aplica el tratamiento. No obstante, a una no se le administra ningún producto, pero a otra se le pone un enraizador comercial y a una más se le colocar un enraizador orgánico. El experimento tuvo como objetivo revisar cuál de las ramas crece más rápido.
Este procedimiento ayuda a que la planta crezca en menos tiempo, desde la semilla hacia la plántula. Normalmente, por esqueje puede desarrollar directamente las raíces y después la planta; eso quiere decir que se ahorran dos años aproximadamente, ya que se considera que este proceso puede durar hasta cinco años.
Actualmente tres alumnas trabajan en el proyecto: Valeria Jiménez Godínez, Alondra Machuca Santiago y Shaili Yamile Pérez Juárez; ésta última fue ganadora en la Feria de la Ciencia del año pasado.
La maestra Chalico cuenta que le agrada hacer trabajos de investigación con sus alumnos, pues en su experiencia como investigadora tanto los estudiantes como ella aprenden mucho en la parte experimental.
“Lo que me gusta también de este tipo de proyectos es que podemos presentarlos en otros foros como son Encuentro Estudiantil, Feria de la Ciencia y la Jornada Estudiantil, que es un evento local en Naucalpan”, explicó
La docente dejó un mensaje: “me encantaría que las alumnas se interesaran más por la investigación”.
Además, mencionó que para los alumnos es importante la experiencia.
“Trabajar en estos proyectos tiene un impacto curricular y académico, además de que los encamina hacia la vocación científica; también les da las bases para un mejor aprovechamiento escolar en sus futuras carreras universitarias”.
Finalmente, extendió la invitación a los alumnos del CCH que estén interesados en el método científico y en las publicaciones académicas, para que se integren a los proyectos que se realizan en los invernaderos del plantel y se den la oportunidad de vivir la experiencia científica.
