En entrevista con el profesor Adolfo Trinidad Juárez a cincuenta años de labor como docente nos comparte sus experiencias en la enseñanza de las asignaturas Estadística I y II y Cálculo I y II en el CCH Vallejo: “Ser profesor en el Colegio requiere el compromiso de nunca dejar de aprender, a pesar de ser docente, no ha habido un solo año que no haya aprendido algo nuevo de mis alumnos que me impulse a seguir preparándome y formándome para así brindarles una educación de calidad y un acompañamiento cálido que les invite a seguir estudiando”, aseguró Trinidad Juárez.
A su llegada al Colegio, el profesor relata que jamás se imaginó tener la vocación para poder ser un buen docente: “Llegué aquí con el ánimo de encontrar una vocación en la vida y se me presentó esta oportunidad donde podría tener el orgullo de pertenecer a la UNAM. Jamás pensé dedicarme a la docencia, sin embargo, me enamoré de esta profesión y se convirtió en mi motivación y forma de vida”, afirmó.
Para el profesor su llegada al Colegio fue una completa coincidencia, pues según lo que relata él se encontraba estudiando la licenciatura en Actuaría en la Facultad de Ciencias. A unas cuantas asignaturas de concluir la carrera escuchó que se ofertaban lugares para trabajar en el Colegio de Ciencias y Humanidades y, ante la necesidad de conseguir un sustento para sostener sus estudios, acudió al llamado.
“Admito que durante mi primer acercamiento a la docencia me sentí nervioso, pues los cecehacheros siempre se han distinguido por investigar, preguntar, indagar, razonar y debatir lo que se les está enseñando, acostumbrándome a siempre seguir preparándome para de una manera acertada enseñar y transformar a la juventud a través del aprendizaje de las matemáticas. A 50 años de servicio, ese es mi legado,me llevo miles de experiencias gratas y espero seguir cosechando más dentro de este mi hogar, mi CCH Vallejo concluyó” Trinidad Juárez
