“Nos pasamos
la infancia
contando piedras, plantas,
dedos, arenas, dientes,
la juventud contando
pétalos, cabelleras.
Contamos
los colores, los años,
las vidas y los besos,
en el campo
los bueyes, en el mar
las olas. Los navíos
se hicieron cifras que se fecundaban.”
Pablo Neruda, “Oda a los números”.
Alfonso Reyes, Pablo Neruda, Gloria Fuertes y Enrique Morón son algunos de los muchos poetas, ensayistas y literatos que encontraron en las matemáticas el mejor modo de exponer el mundo, la vida cotidiana, el amor, la razón; una relación entre ambas áreas que fue compartida por los profesores Elizabeth Hernández López (Naucalpan) y Javier Galindo Ulloa (Vallejo) a los cecehacheros del plantel Naucalpan.
El Jardín del Arte fue el escenario para escuchar la Lectura en Voz Alta de Poemas Matemáticos, actividad que formó parte de la Primera Semana de las Matemáticas, organizada por dicho centro escolar.
El espacio al aire libre bajo los primeros rayos del sol fue propicio para traer desde la memoria el recuerdo de cómo las distintas áreas del conocimiento se pueden vincular, como lo hizo la maestra Elizabeth al compartir que su profesor de matemáticas en el bachillerato los acercaba al saber abstracto a través de la literatura, en específico, la poesía.
Alberto Saucedo “nos compartió cuentos para hablar de matemáticas, nos leía poemas, y eso nos traía la idea de que, para explicar el mundo, posicionarnos ante él, necesitamos metáforas y muchos lenguajes, lo que hace que se vuelva tan complejo, de lenguajes humanísticos, matemáticos”, recordó.
Además, señaló que muchos de los primeros filósofos de la antigüedad y aquellos hombres y mujeres de ciencia se explicaban el mundo a partir de los números, “pero también aludían a las palabras, metáforas y comparaciones. Neguémoslo o no, los números son parte de nosotros”.
Explicó que aun cuando se asocia a la razón con el uso del lenguaje matemático o de las ciencias experimentales, también está en los componentes, “en las estructuras de un poema y viceversa, en el discurso poético, están en esos discursos plagados de razón”.
El profesor Javier Ulloa ahondó: “en cierta medida, la literatura ha tenido relación con las matemáticas en cuanto a la forma la lógica de problemas matemáticos; hay relatos que se argumentan en las matemáticas. Lewis Carol, en Alicia en el país de las maravillas, está relacionada con la lógica, puesto que él era matemático”.
Esto también se observa en “Edgar Allan Poe, en el cuento del Escarabajo de oro, donde se basa más en la argumentación, en la lógica”.
Resaltó que lo abstracto de las matemáticas también lo han replanteado ensayistas como Alfonso Reyes en su texto El Deslinde, donde se refiere a las matemáticas, a la lógica; la obra Piedra de sol, de Octavio Paz, se basa en el año 583, venusino, y es de manera cíclica.
Además, indicó que en los poemas existe el cómputo de cuántas sílabas tiene un verso en un romance, en un soneto, o cuántos versos tiene la estrofa.
En Oda a los números, de Pablo Neruda, “vemos cómo va contando las horas del tiempo, de la naturaleza, de la vida cotidiana; están dentro de nuestra vida social las matemáticas y obviamente se relaciona con la literatura y es una forma de inspirarse para escribir, para darle forma a un poema”, dijo.
“Es una forma de instruir al lector, ver la utilidad que tienen las matemáticas y cómo forma parte de nuestro tiempo, de nuestra forma de ver la ciencia, pero además de encontrar la poética en las matemáticas, en los números”, comentó.
Para Liam Valverde, estudiante asistente, el recital fue agradable y bonito.
“Casi no se habla mucho de la relación de la poesía y las matemáticas, y juntas hacen muy bonito complemento. Me lleva a verlas desde una perspectiva más abierta, más artística”.
En tanto, a Angela Siendo le pareció interesante el poema que leyó la maestra Elizabeth Hernández sobre los triángulos.
“Nunca se me había ocurrido que pudiera existir esta relación. Pensándolo bien, muchas cosas están vinculadas con los números”.
Alma Domínguez destacó que la lectura le permitió ver que las matemáticas están unidas a la vida cotidiana: “aunque las queramos evitar, es bonito darse cuenta de que todo está relacionado con nuestro día a día. La manera en que leyeron los poemas fue atractiva, le dieron un enfoque más metafórico, me gustó”.
Por último, Ximena Torres señaló que los ponentes la llevaron a entender cómo el lenguaje matemático se relaciona con la vida cotidiana.
“Me gustó mucho la manera en que lo explicaron y nos adentramos al tema, fue bastante atractiva. Poesía y matemáticas, me encantó la combinación”.
Por culpa de los números
estuve siempre mal en todo cálculo.
Por no poder usar los logaritmos
la cuenta de mi vida se fue al suelo.
Jamás hallé mi siete
ni pude poner cifras a mis letras.
No supe el porcentaje de mis fraudes.
Tal vez por eso mismo
no tuve nada exacto.
Por no poder restar decimales
Me fui llenando de humo,
de vientos y palomas
y nunca pude ser un tres resuelto.
Violeta Luna, Por culpa de los números.
