ELIA SOLEDAD PÉREZ NERI

Elia Soledad Pérez Neri, maestra del plantel Vallejo

La docente hace un homenaje de memoria a sus mentores de Física y de Biología

Elia Soledad Pérez Neri, maestra del plantel Vallejo
La docente hace un homenaje de memoria a sus mentores de Física y de Biología

Su memoria le trae al presente a “dos queridos profesores” cuyos métodos replica en clase con sus alumnos, “porque favorecen un ambiente amigable y respetuoso”. Ella es Elia Soledad Pérez Neri, profesora de Biología del plantel Vallejo del CCH y menciona a sus mentores en el marco del Día de Maestro.

“El primero es Eugenio Delgadillo, profesor de Física y Cálculo Diferencial e Integral. Estricto, pero entregado a su labor. Siempre nos decía: ‘la noche es larga, el café barato y ustedes son jóvenes’. Nos exigía mucho porque creía en nosotros, nos respetaba y era justo”.

El segundo es Juan Carlos Zorrilla, profesor de Biología: “Recuerdo su entusiasmo y compromiso. Nos llamaba siempre ‘doctor’ o ‘doctora’. El mensaje implícito era que podíamos lograr todo lo que nos propusiéramos en la vida”. Sus clases y sus prácticas de campo eran siempre momentos divertidos y de mucho aprendizaje”.

Pérez Neri habla también sobre su experiencia en clases virtuales y refiere que la formación del docente cecehachero es sólida. “En ese sentido, pude hacer frente a la educación a distancia, pues ya tenía integradas a mi práctica docente las TIC y las TAC. De igual manera, mis estudiantes cuentan con la formación en el uso de estos recursos para el aprendizaje, además de su gran disposición a continuar con las clases y de su extraordinaria capacidad de adaptación”.

Considera que, “en estos momentos tan difíciles y dolorosos para la humanidad”, continuar con las clases ha sido una oportunidad para permanecer en contacto. “Mis estudiantes y yo hemos aprendido lo que hemos tenido que aprender dadas las circunstancias y eso es maravilloso”, destaca.

Además de los propósitos y aprendizajes propios de las asignaturas, asegura, han aprendido a enfrentar esta nueva realidad, a comunicarse a distancia, a organizarse, a perder el miedo o pena para hablar ante una computadora, a relacionarse y a conocerse.

Hasta hoy, no ha recibido la vacuna anti-Covid y espera ansiosa su turno: “Vislumbro mi futuro como docente aprendiendo más, trabajando con mis estudiantes, afrontando los retos que vendrán en estos tiempos de pandemia; probablemente bajo una modalidad híbrida, por lo menos en los próximos tiempos, siempre tratando de contribuir con mi granito de arena en la formación de los jóvenes de bachillerato, lo cual representa un gran desafío y una gran responsabilidad, buscando nuevas formas para estar cerca de mis estudiantes a pesar de la distancia”.

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