El cine tiene un valor cultural, artístico e histórico que se debe aquilatar, pues es capaz de retratar una época, las formas de ser hacer en las relaciones humanas, valores, costumbres, formas de pensar, hasta en maneras de entretenerse como sociedad, destacó el profesor Miguel Ángel Landeros, en su charla “El Origen del CCH Oriente y el cine mexicano contemporáneo”.
Acompañado por el profesor Gerardo García Palacios, coordinador del Área de Talleres de Lenguaje y Comunicación, del turno vespertino, Landeros ejemplificó lo dicho con la película Roma, de Alfonso Cuarón, que retrata una época del México que se nos fue, específicamente la década de los setenta, mismo contexto en el que surge el plantel Oriente del CCH.
Cuarón retrata esa época a partir de la relación familiar y la cercanía con las empleadas domésticas que origina toda una narrativa visual sobre cómo era nuestra atmósfera y problemática en ese tiempo, incluso nuestras calles, con sus luces y sonidos.
La caracterización de las clases medias y bajas o muy pobres, las relaciones familiares de “clases acomodadas”, el amor y el desamor, la migración del campo a la ciudad, la vida entre el desarrollo y la marginación y, finalmente, la represión gubernamental, son algunos de los aspectos que aborda la película, ganadora de los premios Oscar a Mejor dirección, Película de habla no inglesa y Fotografía.
Roma, abundó, refleja la niñez de este director mexicano, que logró capturar en un filme la fatalidad en ese jueves de Corpus Christi, con El Halconazo, al mismo tiempo que narra la historia de Cleo (protagonizada por Yalitza Aparicio) en medio de una relación familiar disfuncional.
Otra cinta que da contexto a la creación del Oriente fue Cómo no te voy a querer, que narra la historia de dos jóvenes cecehacheros, avecindados cerca del plantel, quienes viven una relación amorosa con diferentes perspectivas.
El filme de Víctor Avelar aborda las peripecias al interior del Colegio y la aspiración de los protagonistas; ella desea terminar sus estudios y él sueña ser futbolista.
Ambas películas ubican en tiempo y espacio la fundación del CCH y después la primera década del siglo XXI.
