Ana Isabel Morales Villavicencio

Ana Isabel Morales Villavicencio

Critica el individualismo; hay que cambiar para crecer, dice la doctora

Ana Isabel Morales Villavicencio
Critica el individualismo; hay que cambiar para crecer, dice la doctora

Luego de ocho años de impulsar diversas iniciativas a favor de la salud de los cecehacheros en el plantel Naucalpan, la doctora Isabel Morales Villavicencio emprenderá una nueva etapa en la Dirección General del Bachillerato, donde confía que tendrá más experiencias enriquecedoras, como las que vivió aquí, donde incluso ayudó a una alumna a dar a luz.

Entrevistada a propósito de este giro en su trayectoria, Morales comentó que llegó al plantel con mucho ánimo y esperanza, con varios proyectos; emocionada porque “aquí fue mi primera experiencia con menores de edad, que están solos y no necesariamente tienen a los papás a su lado”, y porque hasta ese momento únicamente había trabajado en escuelas privadas.

Originaria de una comunidad alejada del estado de Veracruz, Morales llegó a la Ciudad de México a los 14 años, estudió la secundaria y luego el bachillerato en la preparatoria número 2, para luego cumplir su sueño que tenía desde niña de estudiar Medicina, lo cual hizo en Ciudad Universitaria, donde además cursó una especialidad de dos años en Cirugía General.

Ya en Naucalpan, dijo, su paso ha estado lleno de situaciones memorables, como cuando ayudó a dar a luz a una alumna a la que se le adelantó el parto en uno de los baños.

Si bien fue complicado, explicó, “todo el equipo de servicio médico atendió y logramos el alumbramiento con éxito”. Otro evento de esta índole se presentó con otra estudiante que tuvo una ruptura de membrana y un fuerte sangrado que sobresaltó a la comunidad. En esta ocasión, se controló el imprevisto y se canalizó a la alumna a una clínica para su atención.

 

Kilotón y Zumba

Dos de las iniciativas más exitosas de la doctora en Naucalpan han sido el Kilotón y sus clases de fitness y zumba, que responden a la inquietud permanente que tiene respecto al cuidado de la salud. Quizá, dice, por haber crecido cerca de la naturaleza. En su pueblo, todo era sano: “tomabas la fruta del árbol, la leche de la vaca, el agua del río; ahí no había doctores”.

Hizo las propuestas y para su sorpresa fueron muy bien recibidas en la comunidad, al darse cuenta de los beneficios de la activación y la dieta sana; un cambio que se operó desde la dirección y que ni siquiera la pandemia ha frenado, pues esas actividades se mantienen.

La doctora Morales deja también una huella en las publicaciones y redes sociales del plantel, donde ha colaborado con temas de salud general, sexual y reproductiva, e incluso desde la ficción, escribiendo sobre problemas mentales; sin dejar de mencionar las clases de fitness que ofreció vía Zoom por Pulso TV. Sin duda, se le va a extrañar. ¡Mucha suerte doctora en su nueva responsabilidad! 

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