Luciano Morales, responsable del Departamento de Psicopedagogía en el plantel Oriente, reveló que el programa de atención universitaria ESPORA arrancó en este centro educativo para apoyar a las y los estudiantes.
En entrevista, comentó que el Departamento de Psicopedagogía ofrece orientación psicológica a los jóvenes: “ésta tiene que ver con la contención de alumnos con crisis de ansiedad, principalmente, que se nos ha presentado y hemos atendido, así como otros tipos de malestar o padecimiento de carácter emocional”.
“La contención que, por ahora, se ha dado a nuestros alumnos consiste en asesoría y psicológica; además, realizamos la canalización al área de psiquiatría, donde algunos estudiantes fueron valorados y atendidos”, dijo.
En el caso de ESPORA, indicó que el proceso arrancó al establecer contacto con sus integrantes: “nos explicaron cómo iba a funcionar su apoyo y oficialmente empezamos a trabajar con ellos hace semanas”.
El orientador destacó que en el plantel Oriente, el Departamento de Psicopedagogía funge como enlace para canalizar a los estudiantes que soliciten apoyo.
Asimismo, puntualizó que el servicio se ofrece sin cita: “los estudiantes llegan directamente a la puerta. Tenemos un equipo de orientadores que se encargan de atenderlos todos los días”.
El orientador destacó que muchas veces las instituciones de salud públicas y privadas tardan hasta un mes para recibir a los pacientes y emitir una primera valoración.
“ESPORA nos ha dicho que en otros planteles hacen una convocatoria pública a todo el alumnado, pero esto ha provocado una larga lista de espera. Como tenemos muy bien estructurada esta parte de la orientación psicológica, preferimos que en esta primera fase seamos nosotros quienes canalicen a los alumnos”, agregó.
Luciano Morales resaltó que en esta primera fase con ESPORA “ya canalizamos a algunos de nuestros alumnos que previamente habíamos atendido, revisado y trabajado con ellos y evaluamos que requieren una atención mayor a la orientación que nosotros podemos brindarles”.
“Gracias al programa de ESPORA, cuatro alumnos que requerían el diagnóstico psiquiátrico lo consiguieron en una semana. Tenemos pendiente una reunión con el personal para saber sobre uno de estos pacientes”, dijo.
En cuanto a los espacios físicos, Morales explicó que al programa se le asignaron siete cubículos y una sala de juntas en el edificio W. Además, se estableció que las y los alumnos cuya situación sea valorada como alta prioridad fueran atendidos en ESPORA.
Por último, reveló que se detectaron siete casos más “de tal manera que los estudiantes serán atendidos por ESPORA. En este programa vamos a contar con cinco terapeutas, más una psicóloga responsable del proyecto, Patricia Gómez. Esto es bueno porque podemos hablar de alrededor de 70 horas frente a paciente, algo muy útil que le brindan a la comunidad estudiantil”, concluyó.