El estudio de la etimología va más allá de un conocimiento a fondo de la lengua que hablamos todos los días, ya que a través de ella conocemos la historia y la cultura a la que pertenecemos, sin desdoro de las raíces autóctonas de México.
Por ello, es importante que los jóvenes se acerquen a conocer el origen de nuestra lengua a través del conocimiento de la etimología griega y latina, ya que son el núcleo en los estudios humanísticos y una ventana al conocimiento, una tarea en la que el Colegio se ha distinguido, ya que cuenta con el mayor número de estudiantes de estas lenguas clásicas.
Lo anterior es uno de los fundamentos de la Quinta Olimpiada Etimológica ciclo 2023-2024, la cual se desarrollará en febrero y marzo de 2024, y que está dirigida a los estudiantes del bachillerato universitario de la UNAM, es decir, del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH), la Escuela Nacional Preparatoria (ENP), el Bachillerato a Distancia, así como del Sistema Incorporado.
Este concurso es convocado por la UNAM, la Asociación Mexicana de Estudios Clásicos (AMEC), el Instituto de Investigaciones Filológicas, la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL), el CCH, la ENP, Bachillerato a Distancia y la Dirección General de Incorporación y Revalidación de Estudios (DGIRE).
Además, cuenta con el apoyo de la Academia Mexicana de la Lengua, la Academia Mexicana de Ciencias, el Seminario de Cultura Mexicana, la Embajada de la República Helénica en México y el Organismo para la Difusión de la Lengua Griega.
Sobre esta actividad, Laura Estela Vásquez, coordinadora de Idiomas e integrante del comité organizador de la Olimpiada Etimológica, recordó que este evento surgió por parte de la AMEC, en colaboración con el Instituto de Investigaciones Filológicas (IIF), ya que estas instancias consideraron importante recuperar el vínculo entre el IIF y el bachillerato universitario, además de incluir a las escuelas que forman parte de la DGIRE.
“El concurso promueve estas lenguas, incentiva su estudio y contribuye a la cultura básica del bachiller (…) También tiene la finalidad de contribuir en la formación de los jóvenes que van para Ciencias. (Buscamos) encaminarlos y que no tengan miedo de mirar hacia los institutos”, destacó.
Vásquez Montes recordó que el año pasado México fue sede de la Federación de Estudios Clásicos, conformado por 37 países y más de 80 asociaciones de estudios clásicos, donde maestros de tres planteles fueron ganadores con sus alumnos “y eso motiva muchísimo”.
“Esta experiencia la vamos a llevar a las Olimpiadas. Al ser entidad convocante, el CCH demuestra ser la escuela con más alumnos que estudian latín, hablamos de siete mil jóvenes en los cinco planteles. En griego hay menos, de tres mil a cuatro mil estudiantes, sin embargo, a nivel Latinoamérica somos la escuela que más apoya estas asignaturas en el bachillerato, es importante que lo demos a conocer y defendamos esta cultura clásica en México”.
Desechando mitos
La profesora reconoció que existen mitos alrededor de las asignaturas de Griego y Latín, sin embargo, “en la Secretaría de Planeación se lleva un proyecto de trayectorias. Entre las 10 carreras con mayor demanda aparecen Medicina, Derecho y Pedagogía y resulta que tenemos asignaturas que impactan a los estudiantes a nivel licenciatura. Estos aprendizajes son la habilidad comunicativa y aprender otra lengua, que les proporcionan competencias lingüísticas”.
Por ello, expuso que el complemento lexicológico, “ese campo de palabras etimológicas, ayuda al alumno en carreras muy concretas como Medicina, con todas las etimologías médicas y su vocabulario”.
Además, este tipo de aprendizajes también se pueden aplicar en las licenciaturas de Derecho, Literatura e Historia:
“en el Colegio contribuimos desde varias perspectivas a partir del estudio de la lengua griega o latina. Es muy bonito, porque quizás sea la última oportunidad que tendrán en su vida, de tener este contacto con estas culturas”, dijo.
Comentó que aprender griego es una experiencia divertida, ya que los jóvenes realizan ejercicios de caligrafía y pronunciación; asimismo, se utiliza el griego antiguo y el moderno:
“El nivel que tenemos es de compresión y traducción de textos griegos o latinos de gradualidad básica, los escritos de mitología son muy populares”.
Asignatura esencial
Aurelia Vargas Valencia, coordinadora general de la Quinta Olimpiada Etimológica, expresó que México cuenta con un patrimonio intangible, ya que el idioma español (predominante en el país) utiliza palabras de origen griego, latino y de lenguas originarias.
En ese sentido, dijo que hasta 75 por ciento son de origen latino y alrededor de 12 por ciento griegas, “porque también hay palabras del náhuatl que vemos en muchos topónimos de la Ciudad de México y varias partes del país, así como otras lenguas originarias que provienen de otras familias lingüísticas mesoamericanas que aportan vocablos al español y lo enriquecen”, expuso.
Por lo anterior, comentó que la Quinta Olimpiada Etimológica “es esencial desde el ámbito de las humanidades, pues se busca acercar a los muchachos a que estudien los orígenes de la lengua. Sobre las lenguas clásicas, las denominaciones están dadas en orígenes remotos de hace 5 mil años antes de Cristo con el origen de las lenguas indoeuropeas. Conocer esa historia permite dar o proveer de conciencia histórica a nuestros alumnos”.
Un nuevo desafío
La integrante del Instituto de Investigaciones Filológicas informó que para esta edición se afinaron algunos aspectos del vocabulario en atención a las sugerencias de los profesores.
“Cada nueva olimpiada incluimos algunos términos diferentes con la idea de ir acercándonos más a determinados conocimientos que tienen los jóvenes en distintas materias. La contienda es intensa e interesante, porque vemos que los niveles de aprendizaje están muy a tono con las exigencias del certamen, lo que habla de un trabajo de la planta docente muy importante”, dijo
Vargas Valencia agregó que a través de las asignaturas de Griego y Latín que se imparten en el Colegio, los maestros “ven la manera de desprender los conocimientos etimológicos. Hay un trabajo extraordinario, hay que generar más y mejores condiciones de enseñanza; el mundo, más que nunca, requiere de la formación humanística de los jóvenes. Las humanidades clásicas son esenciales”.
Por ello, resaltó que este tipo de estudios deberían empezar, por lo menos, desde el nivel secundaria: “el acercar al niño a las raíces o étimos que conforman la lengua. Así evitamos memorizar tantos vocablos en la profesión que elegimos, pues un solo étimo puede producir una enorme cantidad de vocablos en el español”.
“Si el alumno conoce la sistematicidad formal de la lengua para producir vocablos le evita el aprendizaje de un listado de palabras interminables; si conoce el significado de un étimo, ya está conociendo la mitad de todos aquellos términos que se derivan de ese”, dijo.
Detalló que no se trata de memorizar, sino aprender a ver el recurso de la analogía en la lengua: “las ciencias y las humanidades acuñan nuevos vocablos, neologismos, recurriendo a vocablos latinos o griegos”.
En este sentido, invitó a los jóvenes a que se acerquen a conocer el origen de la lengua a través del estudio de la etimología griega y latina, que son el núcleo en los estudios humanísticos, así como a participar en el Olimpiada.
Ventana al saber
“El estudio de la etimología deriva en el mejor conocimiento de nuestra lengua”, por lo que aquel joven que se enfoca en este estudio adquiere automáticamente mejor conocimiento del castellano, “se vuelve más hábil en su expresión oral y escrita por el conocimiento de la etimología”.
Germán Viveros Maldonado, presidente de la AMEC AC, señaló que la Olimpiada Etimológica busca reconocer el trabajo del estudiantado, sobre todo la relación que tiene el español con la lengua latina clásica y griega.
El investigador comentó que la asociación que preside da seguimiento a aquellos estudiantes que destacan en el certamen; “en esta asociación no solo hay colegas docentes, sino sobre todo estudiantes y aquí es donde entran los que participan en las Olimpiadas Etimológicas, sobre todo los que triunfan”, dijo.
El también integrante de la Academia Mexicana de la Lengua llamó a hacer énfasis en la importancia y el sentido práctico que tiene el conocimiento de esta disciplina.
“La etimología deriva en el mejor conocimiento de nuestra lengua, lo que para mí es de la mayor importancia. Es decir, el estudio de esa disciplina tiene un sentido útil, práctico. A los profesores les recomendaría que ahonden en esta disciplina, sobre todo en lo que se refiere a la bibliografía”, finalizó.