Paola Nieto, alumna del plantel Azcapotzalco; Naomi Orduña, de Naucalpan, y Alexa Baca, del Sur, protagonizaron la lectura dramática de la pieza La prudencia, una tragicomedia del argentino Claudio Gotbeter, que narra las vicisitudes de dos amigas que se reúnen a esperar la llegada del año nuevo.
Mientras aguardan, una tercera amiga hace su aparición con el mismo propósito, pero su presencia se percibe perturbadora, un peligro agobiante del que se tienen que proteger y, ante todo, ser prudentes.
Durante la sesión virtual, la profesora Olivia Barrera dijo que la propuesta se llevó a cabo en línea por tratarse de un texto breve, de unas 20 cuartillas, y por ser actrices de distintos planteles, por lo cual resultaba más práctico ensayar vía Zoom.
Se trata de una farsa, un género que funciona mucho en el Colegio, creo que porque a los jóvenes les parece divertido y al mismo tiempo crítico. Es un género que se sirve del humor y la exageración para criticar, pero también para hablar de problemas que encara el individuo frente a la sociedad o frente a sí mismo.
“A mí me gusta mucho trabajarla en el Colegio, que se distingue por tener un alumnado mordaz, que empieza a desarrollar un pensamiento crítico y al que también le importa mucho la justicia social, por eso siento que la farsa nos viene bien”, consideró Barrera.
La historia de La prudencia ocurre en un departamento, donde se escucha música navideña; en el lugar, dos amigas de edad avanzada platican mientras brindan por el nuevo año, deseándose parabienes. Se quejan de sus múltiples problemas de salud, cuando escuchan que alguien toca a la puerta, esperan a Nina, pero dudan en abrirle hasta que se identifica plenamente. Sin embargo, cuando lo hacen, es la propia Nina la que se llevará una desagradable sorpresa.
Al finalizar la lectura dramatizada, el profesor Juan Alberto Alejos platicó con las actrices, por ejemplo, Paola, quien interpretó a Trinidad, comentó la importancia del teatro en su vida: “Es una forma en la que me puedo expresar libremente, porque en mi vida normal no soy una persona que va gritando como lo hace el personaje que interpreto.
“Creo que el compartir con otras personas, el tener esta comunicación, que muchas veces no es verbal, es algo muy lindo; creo que el teatro nos enseña muchas cosas, no sólo en tu vida personal, también pueden llevarte a aprender, a hacer amigos. Otra cosa importante es que aprendes, por ejemplo, cuando se habla y critica acerca de las declaraciones de guerra de otros países, te lleva a reflexionar acerca de cómo está la sociedad y el entorno en el que vives”, señaló.
Por su parte, Naomi interpretó a Margarita y habló sobre la forma de trabajo. “En los ensayos la profesora Olivia siempre nos acompañó durante todo este proceso, nos guio e instruyó todo el tiempo en lo que debíamos mejorar, pero también nos dejó armar la construcción de nuestro personaje desde nuestra perspectiva, no nos imponía que el personaje tenía que ser de cierta forma, nos dejó ser libres, ponerle un poquito de nuestro estilo”.
Alexa, quien interpretó a Nina, habló del discurso que está dentro de la obra: “La verdad a mí me gustó mucho el guion, me pareció muy divertido, en especial por el sarcasmo y la ironía que manejan personajes como Trinidad y Margarita, que juegan mucho con su inocencia, por así decirlo, y cómo a partir de esto vamos distinguiendo diferentes problemáticas de la vida cotidiana; entonces, para mí es muy divertido mostrar esto en una hora y hacerlo para ustedes”.
