Al señalar que ha habido un cambio normativo y estructural en la UNAM en torno a la violencia y perspectiva de género, la doctora Mónica González Contró, abogada general de la Universidad, afirmó que estas reformas son resultado de años de reflexión, trabajo y de escucha a la comunidad universitaria, lo cual llevó a la modificación del Estatuto General.
En la sesión Protocolo contra la violencia de Género, en el plantel Sur, en la cual se explicaron los procedimientos formales que tiene en la Universidad Nacional para prevenir, erradicar y sancionar la violencia de género, González Contró dijo que la Defensoría de los Derechos Universitarios “facilita esta atención a través de personal especializado, abogadas y psicólogas que tienen experiencia en la atención de estos casos y darán confianza a la víctima”.
Declaró que para llegar a esos cambios que se han mencionado, la Comisión de Legislación del Consejo Universitario recibió a académicas y alumnas, fue sensible al recoger las propuestas. De ahí la importancia de que los estudiantes participen en estos órganos de representación, “porque las propuestas no vienen únicamente de la Rectoría sino son presentadas por la comunidad”.
Indicó que no hay ninguna cláusula en los contratos colectivos de la AAPAUNAM y el STUNAM que impida sancionar a una persona que incurra en una falta e incluso llegar a la recisión, prueba de ello es que a cuatro años de la puesta en marcha del Protocolo contra la violencia de Género en la UNAM se ha rescindido contrato a más de 100 académicos, puntualizó.
Al referirse a las pruebas, dijo que de acuerdo con los criterios de nuestros tribunales se le da un valor preponderante a la manifestación de la víctima en casos de violencia de género.
Normalmente este tipo de hechos ocurre en lugares secretos, si no hay otro tipo de prueba no es indispensable para que proceda el caso y se sanción a la persona responsable, eso sí, tiene que haber un acta bien instrumentada, las circunstancias, modo, tiempo y lugar, y si se tiene testigos, mensajes de chats, correos, etcétera, se fortalece el proceso.
La abogada general dijo que “si no cambiamos los estereotipos y la normalización de la violencia no vamos a poder acabar con esta situación, como ya vimos la Universidad es un reflejo de lo que pasa en la sociedad y tenemos que buscar nuevas estrategias, transformar precisamente esa cultura”, concluyó.
