Uno de los grandes legados de nuestro país para el mundo es la documentación del maíz; por ello, resulta importante para las diferentes ciencias, entre ellas, la biología y la agronomía, el estudio de especies nativas que se producen en el sistema tradicional de milpa.
Con este antecedente los profesores Luz del Carmen Ruiz Amaro y José Ervin Silva González trabajaron en el proyecto INFOCAB “Las aves y la milpa en el CCH Vallejo como estrategia para el logro de aprendizajes significativos” que es asesorado por la ingeniera agrónoma Marisol Colorado Morales.
“Es un espacio multidisciplinario para propiciar el aprendizaje mediante la aplicación de estrategias que permitan al alumno conocer, observar y tocar diferentes objetos de estudio de la ciencia, así como desarrollar habilidades y conocimientos que se pueden aplicar en diferentes entornos con un enfoque sustentable para la conservación de la biodiversidad”, se lee en la descripción del proyecto.
La milpa es un sistema agrícola tradicional que surgió en Mesoamérica, es un policultivo en donde, además, de la siembra de maíz, se puede producir frijol o chile, así como los quelites que crecen en el sistema de manera natural.
La profesora Ruiz Amaro resaltó: “La investigación, particularmente científica, es una actividad que se fomenta entre los estudiantes del CCH dentro y fuera del aula; es así como el modelo educativo se adapta y promueve la construcción del conocimiento objetivo, para que los estudiantes sean capaces de interpretar la naturaleza de una manera lógica, racional y mejor fundada a través del conocimiento científico”.
Este sistema se encuentra intercalado con árboles frutales y se cultivan diferentes variedades de maíz y frijol. Adicional a esto, docentes y cecehacheros trabajan en la conservación de maíz palomero mediante el cultivo y en la producción de un banco de semillas.
“Conservar la milpa significa conservar el conocimiento de muchas generaciones de agricultores de distintos pueblos y representa un patrimonio cultural y biológico de alto valor, ya que los productos que obtienen son la base de la alimentación”, describió Nadia López Jasso, integrante del proyecto.
Uno de los objetivos del proyecto es contribuir a la conservación de las especies nativas de maíz, particularmente, del palomero y cuatro especies nativas, mediante el conocimiento de los rasgos funcionales.
La meta para el semestre 2024 es iniciar una nueva etapa en donde se trabajará con otras especies nativas comestibles. “Nuestro interés es contribuir junto con los alumnos a la conservación de la biodiversidad y al manejo sustentable en la producción de especies importantes para la alimentación y cultura de México. Adicional a esto, se pretende elaborar diversas estrategias didácticas que apoyen los temas de los programas vigentes en el Plan de Estudios de Biología y Química”, concluyó el profesor Silva González.
