La coordinadora de la Mediateca local, Patricia Rodríguez Montero, destacó la importancia de obtener la certificación de un idioma, así como impulsar su aprendizaje en el Colegio, ya que este documento es reconocido por universidades en el extranjero para apoyar estancias o intercambios académicos.
En entrevista, la coordinadora señaló que el documento avala el nivel de dominio de un idioma A1 y A2 es para nivel básico; B1 y B2, nivel intermedio y C1 y C2, nivel avanzado.
En este sentido, si los alumnos empiezan a estudiar un idioma en el nivel medio superior, cuando lleguen a la licenciatura contarán con una gran herramienta para acceder, por ejemplo, a información que está en otro idioma, y también les ayudará en el proceso de titulación.
Tras indicar que a los estudiantes tendrán una visión amplia de su entorno, porque entran en contacto con otra cultura, lengua y forma de pensar, resaltó el trabajo de la Dirección General de Cooperación e Internacionalización (DGECI), la cual cuenta con convenios entre la UNAM con universidades del mundo. A partir de estos acuerdos los estudiantes pueden ir a estudiar semestres de su carrera en esas universidades.
“De ahí la importancia que desde el bachillerato se les informe e impulse para que comiencen a tener la expectativa de participar en concursos (como Jóvenes en Acción) y viajar al extranjero, o bien, en el futuro estudiar algunos semestres de la licenciatura en otro país”, expresó.
Asimismo, comentó que en la Mediateca se brindan apoyos a los estudiantes como asesorías, ya que si tienen dudas se pueden acercar a un profesor: “hemos logrado consolidar que se den cursos de preparación para presentar la certificación de dos lenguas curriculares: inglés y francés; así como de italiano, por segundo año consecutivo”.
“Cuando pienso en la certificación de una lengua extranjera, lo hago desde un contexto académico porque estamos en un plantel del bachillerato de la UNAM”, dijo la académica, quien comentó que, por el lado docente, se busca que crezca la incidencia en la formación académica de los alumnos, en su profesión y en lo que se dedicarán en su campo laboral.
Por último, explicó que en la Mediateca “hemos visto en los estudiantes que los idiomas los pueden descubrir por gusto, motivación, curiosidad; se dan cuenta de las similitudes que tienen con su lengua materna u otro idioma extranjero que ya conocen o han estudiado. Empiezan a estudiar por gusto y no como una obligación, vemos que están motivados de estudiar por iniciativa propia”.
