“Vivimos en un mundo fragmentado, aunque nuestra existencia sea lineal, vivimos a pedazos, somos unos mientras hablamos, somos otros cuando contemplamos una película; somos instantes, fragmentos de nosotros mismos y eso se refleja en nuestro quehacer literario”, señaló Mauricio Carrera en la conferencia Cómo narrar desde la ficción, durante el ciclo Cecehacheros en la cultura.
El prolífico escritor describió los elementos de una narración, mencionó y recomendó a los estudiantes grandes escritores y también habló del Nuevo Periodismo, que, aunque utiliza estos componentes, lo hace para contar una historia reflejo de la realidad.
El también profesor afirmó que contar una historia de manera sencilla y simple, como lo que hicimos en un trayecto de tal lado a otro, eso es narrar y ha existido desde que la humanidad es humanidad, en la cueva prehistórica donde tenemos a los primeros seres humanos contando historias acerca de lo acontecido afuera de su cueva.
“Narrar, precisamente desde la ficción, es exactamente lo mismo que contar, pero con los elementos propios de la narrativa, como la descripción, poner en palabras cómo es el ambiente, la geografía o los personajes. Otra característica son los diálogos, y lo que suelo denominar escenas simbólicas, debemos escoger partes significativas de la historia principal. Un elemento más es el uso de alegorías o metáforas.
“Lo más bonito del arte de narrar desde la ficción es el proceso creativo, que es un misterio, dependerá de cada quién cómo lo desarrolle”, puntualizó.
En los años sesenta, agregó, empezó un movimiento importante que se denominó Nuevo Periodismo o novela de no ficción, que consistía en utilizar estas técnicas, pero para describir la realidad desde el punto de vista periodístico, estas herramientas nos pueden funcionar muy bien para contar una historia inventada o una que es un reflejo de la realidad, señaló.
Al contar historias, muchos cuentacuentos o especialistas en oralidad también los utilizan y son precisamente esos elementos lo que van a llamar la atención de quien los escuche o lea. Si se utilizan de manera equilibrada se puede narrar muy bien y de diversas maneras. Varios escritores lo han hecho, como Ernest Hemingway, un maestro del diálogo y las descripciones.
