“Tengo varios universos, obsesiones. Por un lado, tengo todo el universo relacionado con lo raro, el terror, la fantasía oscura. Por el otro lado, está la ficción y un poco la no ficción, el periodismo por supuesto, y dentro del periodismo, lo musical. En particular, en cuanto a fenómeno, el fandom. Después, la crónica de viajes que me gusta mucho y, en general, se resume a los viajes por cementerios. Todo es medio macabro claramente (…) Creo que siempre fue por ahí, no creo que uno cambie demasiado como escritor. Uno tiene distintos modos de abordarlo, desde la no ficción, a lo mejor desde el ensayo, la autoficción, la novela gráfica, alguna colaboración (…) en general, creo que un escritor, si tiene suerte, tiene una amplia gama de géneros y estilos en los que puede plasmar las mismas obsesiones”.
Con estas palabras Mariana Enríquez, escritora argentina, inició una charla con estudiantes del plantel Sur del CCH como parte de las actividades de la Fiesta del Libro y la Rosa de la UNAM, un encuentro donde expuso los universos que la conforman, entre ellos, aquel donde el terror es uno de los más importantes y relevantes, el cual se puede conocer en Un lugar soleado para gente sombría, su último libro de 12 cuentos y que fue publicado este año.
En esta charla, titulada “El terror en la literatura de Mariana Enríquez: Encuentro con Jóvenes”, acompañada de Socorro Venegas, directora de general de Publicaciones y Fomento Editorial, de la UNAM, y moderado por Cinthya García Leyva, directora de la Casa del Lago; y Mario Alberto Medrano, coordinador de Publicaciones de la DGCCH, la escritora expuso los diferentes espacios literarios y artísticos donde se ha desenvuelto, entre ellos, el periodismo y el cine: “durante mucho tiempo fui periodista de rock y eso terminó metiéndose muchísimo en la ficción, es un mundo que conozco. Luego, el otro lenguaje que ingresa es a través del cine (…) Yo me creo todo en el cine, soy muy inocente, pero veo mucho cine de género. Tuve la suerte de ser jurado en dos festivales de género, uno es fue en Barcelona y otro en Suiza y fue una experiencia alucinante”, dijo.
La también periodista reveló que sus universos comprenden diferentes facetas y disciplinas, actividades y expresiones artísticas: "a esta altura no se puede limitar los libros. Mis intereses son muy variados, a mí me interesa la narrativa, un estilo de narrativa en particular, pero muchos en general (...). A mí me gusta estar online, ver películas, escuchar discos, ir a shows y me parece que todo eso se puede tranquilamente incorporar a lo que literariamente estás haciendo, no tiene que quedar afuera, como si la literatura fuera algo puro y no contaminado. A mi me gusta la literatura contaminada".
Por su parte, los cecehacheros expresaron sus dudas, entre ellas, sobre la influencia de las experiencias personales para escribir. Enríquez indicó que la materia prima para un escritor, “el primer material que tiene es su experiencia, su percepción de las cosas, de un sujeto que se relaciona con el afuera. Lo importante es saber qué hacer con esa experiencia”.
Al finalizar la charla, Enríquez firmó los libros de su autoría que los estudiantes llevaron e intercambiaron algunas palabras, no sin antes invitar a sumergirse en el universo de la literatura de terror de la autora argentina.
