El orgullo por pertenecer al plantel Oriente y, al mismo tiempo, la nostalgia porque ya no regresarán, fueron las sensaciones de una treintena de profesoras y profesores de este centro educativo que se reunieron en una ceremonia de despedida por su jubilación.
Los profesores cumplieron por años con sus labores, por lo que agradecieron a la Universidad Nacional Autónoma de México haberles permitido realizar su proyecto profesional y de vida en los espacios del plantel Oriente del Colegio de Ciencias y Humanidades.
Entre pláticas, risas y murmullos, uno a uno se reencontró en una sala que lleva el nombre de un insigne universitario: Pablo González Casanova, fundador del CCH, e inspirador de muchas generaciones de docentes que tuvieron la oportunidad de enseñar en un proyecto educativo innovador y de vanguardia para México.
Rostros tristes, felices, incluso nostálgicos, se observaron en una sala repleta de colegas docentes, acompañados por familiares, personal administrativo y directivos de este centro escolar, el cual fue la segunda casa para esos jóvenes que ingresaron en 1972 y otros tantos en esa década de agitación y protesta social, pero también de proyectos e ilusiones para una transformación política, económica y social.
Los recuerdos también invadieron la plática de quienes llegaron con 50 años a cuestas de labores docentes, con el afán de servir a la juventud mexicana de ayer y de hoy. Abrazos, saludos y un anecdotario interminable de los académicos fue el preámbulo para una jornada que reunió a los compañeros de trabajo, quienes con abrazos efusivos, apretones de manos y un beso en la mejilla, despidieron a una generación pionera.
Previo a la entrega de un reconocimiento a los profesores jubilados, la directora del plantel, María Patricia García Pavón, agradeció al personal en retiro por compartir la aventura de ejercer la docencia como un proyecto de vida: “su dedicación y contribución al Colegio fue invaluable. Son todos ustedes maestros, porque maestros son los que dejan huella y, ustedes, la han dejado”, apuntó.
Entre los docentes reconocidos destacaron Carlos Agustín Jiménez Moreno, del Área de Matemáticas; Alicia Rosas Salazar, del Área de Ciencias Experimentales; y María del Refugio Serratos González, quienes cumplieron 50 años de trabajo académico. También la profesora Norma Ledesma Ruiz, con 35 años de labor académica en el Área Histórico Social.
En su intervencion, los profesores agradecieron la oportunidad de pertenecer a la UNAM y desarrollarse en un proyecto educativo joven y de vanguardia; por último, reconocieron el apoyo incondicional de sus familiares para cumplir esta aventura en el CCH.
“Nuestros corazones de puma están rebozando de gusto y alegría. Hemos cumplido y, hoy, pasamos la estafeta a la nueva planta docente que sigue en su afán de contribuir a la grandeza universitaria”, finalizaron.