En la primera década de los 2000 se popularizó un subgénero que, considero, nunca ha sido discutido en El Rincón de la Cinefilia: la parodia. Desde hace muchos años la parodia había sido un género intermitente, pero Scary Movie terminó consolidando las nuevas reglas del género y su método de escritura.
En la época, el secreto para ser gracioso era parodiar tantas películas y personajes como fuera posible, así como explotar cada chiste o referencia social.
Las primeras películas fueron una experiencia refrescante por su irreverencia, sin embargo, rápidamente se convirtieron en el cine más barato que pudieras encontrar. Con presupuestos tan bajos, lentamente la rentabilidad terminó y los intentos de resucitar la fórmula fueron en vano.
Actualmente, el género está prácticamente extinto, pero aún existen productos que retoman sus enseñanzas.
Deadpool & Wolverine es parte de los vestigios de estas películas, tanto por las situaciones absurdas, la ruptura de la cuarta pared y el basarse en una técnica de escritura muy simple: “Después de esto, pasa esto y luego esto y aparece tal o cual…”
Aquí, varios momentos de la película nacen y suceden solo porque los realizadores lo quisieron así, por el objetivo de tener un momento divertido.
Deadpool & Wolverine retoma grandes elementos del género y los mezcla con propios. En mayor o menor medida utiliza tanto herramientas buenas como malas, pero la escritura simple prevalece.
El filme es un decreto especial sobre una serie de personajes nostálgicos que, después de varios años, cancelaciones, errores y aciertos, reaparecen una vez y se muestran como la resistencia…
En un universo tan meta-cinematográfico como éste, llegan y frente al mundo gritan que siguen existiendo y merecen otra oportunidad.
Utilizar estos elementos propios de la franquicia para criticar a la misma industria y estudios me parece brillante y una sátira sutil, elegante y efectiva.
Sin embargo, un grave error de Deadpool & Wolverine es convertirse en una película temporal. No perdurará las décadas y en nuestras mentes solo vivirá como un momento agradable.
Lo dependiente del contexto actual, de otras películas y de conocer a fondo la cultura popular, la convierte en un éxito momentáneo, tal como sucedió con Spider-Man: No Way Home, que envejecerá mal.
Los seguidores y las personas en redes sociales pregonan que es una película solo para divertir. Recordando a Martín Scorsese, es como subir a una montaña rusa, emoción y rapidez en poco tiempo.
No obstante, es momento de abrir la discusión y reflexión para saber si el cine como espectáculo es una evolución lógica o debe cuestionarse su valor al intentar ser parte del séptimo arte. Dudas y sugerencias a: luis@cchfilmfest.com
El dato
Una de las variantes de Wolverine hace referencia a la altura tan pequeña que tiene oficialmente el personaje en los cómics, siendo de 1.60 metros.
-La primera ocasión donde Deadpool y Wolverine se encontraron en el cine fue en la infame X-Men Origenes: Wolverine.
