Jair Contreras Rivera, alumno del cuarto semestre del plantel Azcapotzalco, comenzó a tomarle cariño a la Biología cuando logró comprender ciertos temas de la asignatura y poco a poco creció su interés por conocer más sobre la estructura, funcionamiento, evolución y distribución de los seres vivos. Hoy, sus conocimientos le acaban de valer la medalla de oro en la Olimpiada Universitaria del Conocimiento 2022 y la disciplina se ha convertido en parte de sus proyectos a futuro.
“Desafortunadamente, dicha ciencia no es suficientemente valorada, de hecho, muchas personas la toman como una materia simple y te cuestionan ¿cómo vas a estudiar eso?, sólo vas a ver arañas´ y cosas así, pero la biología va mucho más allá y lo vimos con la pandemia”, reconoció el estudiante.
A decir del joven, la sociedad actual no ve la importancia de los seres vivos, los ecosistemas, a pesar de que su deterioro es evidente, por eso es trascendental que se tome la suficiente conciencia de todo esto y de su estudio.
“Cuando empecé a entender la biología, me impactaba todo lo que pasaba dentro de un ser vivo, incluso dentro de uno mismo, fue después de mi participación en la Olimpiada Cecehachera del Conocimiento que me motivé a estudiar más, a ver qué es lo que estaba pasando conmigo y con mi alrededor”, recordó.
En cuanto al certamen, cabe resaltar que se organizó en dos etapas: la primera consistió en un examen en línea, de ahí surgieron los finalistas; la segunda, que se realizó en Ciudad Universitaria, incluyó una práctica sobre fermentación alcohólica, de donde se obtuvieron datos para analizar y graficar.
Al referirse a su preparación para el concurso, Contreras Rivera subrayó que recibió un gran apoyo por parte de su hermana mayor, quien el año pasado recibió medalla de bronce por sus conocimientos, y con quien se preparó de una manera autodidacta, con apoyo del temario de la Olimpiada Cecehachera, lo que le permitió profundizar en la asignatura.
“Quise participar también en un afán de autosuperación. Mi hermana fue la principal persona que me motivó y estuvo ahí para enseñarme. Puedo decir que me preparé desde el año anterior, alternaba el estudio de un tema difícil y uno fácil, de tal forma que no se me hiciera pesado”, reconoció.
El joven, quien también tiene entre sus actividades favoritas leer obras de Howard Phillips Lovecraft y de Hermann Hesse, compartió que una de las experiencias que le dejó participar en la Olimpiada fue aprender a organizar su tiempo.
“Tenía bastante tiempo libre, pero no sabía qué hacer, sin duda, me ayudó a definir y organizar todo lo que quería hacer; es importante estudiar, pero también lo es tomar descansos y tener actividades libres y recreativas, se debe encontrar cierto equilibrio”, opinó.
Sobre con qué se queda de esta experiencia, explicó que la Olimpiada le dio un impulso a sus estudios, le permitió obtener conocimientos hermosos sobre los seres vivos y lo motivó a seguir en este tipo de actividades; “agradezco mucho este logro y espero seguir participando con otros estudiantes”.
Ahora le gustaría participar en un certamen de escritura, ya que la literatura junto con la biología son dos actividades que hace por sentimiento y no por obligación. Además, continuar en nuevas ediciones de la Olimpiada Cecehachera del Conocimiento.
“Espero este año obtener una medalla, autosuperarme siempre en Biología, aunque también me gustaría participar en Química”, apuntó.
Finalmente, el estudiante, quien tiene como opciones de licenciatura Medicina, Ciencias Genómicas y Biología, invitó a sus compañeros a vivir la experiencia de la Olimpiada, tanto del Colegio como la Universitaria, así como de las múltiples opciones que ofrece la Universidad para los estudiantes, pues, como humanos, tenemos la capacidad de desafiarnos a nosotros mismos.
