Un libro no necesita batería, no se apaga, puede acompañarte a cualquier lugar y siempre estará para ti, reflexionó Emilio Vivar Ocampo, profesor y coordinador del Área Histórico-Social del turno vespertino, del plantel Azcapotzalco, durante la 1ª Feria del Libro, Venta e Intercambio de Libros y Poesía.
Esta actividad se creó como un espacio para fomentar la lectura y el afecto a los libros. Cada profesor participante preparó una dinámica especial con sus grupos.
En el acto inaugural, la profesora Alejandra Ugalde Osornio organizó una sesión de lectura en voz alta de escritos que elaboraron estudiantes sobre cómo se construye el imaginario amoroso a través de la música, las series, películas, o un ensayo que respondiera a la pregunta de cuánto cuesta el Día del Amor y la Amistad.
Además, se llevaron a cabo lecturas en voz alta y trueques de libros. Dichas actividades son trascendentes para el proceso formativo de los alumnos pues les permites imaginar, descubrir y expresarse sobre el mundo que los rodea, y abrirse a compartir sus escritos con los demás.
Desde el punto de vista científico, la lectura es considerada uno de los procesos más complejos, pues incluye la puesta en funcionamiento de diversas áreas del cerebro humano para integrar experiencias, necesidades y el conocimiento de quien lee. Asimismo, es uno de los procesos intelectuales que más influye en la formación de la personalidad de los jóvenes.
Por ello, estas dinámicas ayudan a que, mediante la escucha de cada lectura, identifiquen la idea principal que el autor quiso comunicar, el propósito que lo llevó a desarrollar dicho texto y la estructura que empleó.
Vivar Ocampo destacó que se busca que este sea el primero de muchos eventos para la recuperación del hábito de la lectura en las y los jóvenes, así como se continué incentivando la creatividad literaria y la imaginación.
