Alumnos y alumnas de este plantel participaron el 3 de febrero pasado en el Maratón de Lectura de Poesía Amorosa, que organizó la Coordinación de Literatura y Artes Plásticas de la DGCCH, a través del Departamento de Difusión Cultural local, para destacar la importancia de esta práctica y visibilizar la alfabetización como un derecho humano.
La actividad se realizó en el marco del Día Mundial de la Lectura en Voz Alta, que se conmemora el 1 de febrero, y estuvo a cargo del maestro Otelo Granados.
La pregunta inicial a los cecehacheros fue ¿Cómo sería su vida si no supieran leer?, una interrogante difícil de contestar o siquiera imaginar, pues hoy es difícil concebir el mundo sin leer, aunque en pleno siglo XXI existen comunidades de adultos mayores, jóvenes y niños; hombres y mujeres analfabetas, que nunca han tenido acceso a una formación básica.
En el acto, Cristina Arroyo Estrada, del Departamento de Apoyo Académico de Difusión Cultural del CCH, destacó que para los alumnos y alumnas del Colegio éste sería un espacio para volverse a encontrar, compartir sus gustos e intereses y escucharse unos a otros.
“Tuvimos otras formas de aprendizaje, en la pandemia estuvimos a un clic con nuestros compañeros y profesores, pero dejamos de socializar, el contacto físico, por lo que los invitamos a compartir sus lecturas y deleitarnos con ellas; celebremos leerle al otro y que haya alguien que nos escucha”, subrayó.
Así, los alumnos pasaron a leer poemas tanto de su autoría como de poetas ya conocidos y del gusto popular, al tiempo que coincidieron en los beneficios que tiene la lectura en voz alta, entre ellos, que mejora la dicción, fortalece la memoria, favorece la comprensión lectora y estimula la imaginación.
También beneficia el desarrollo neurológico y emocional en los niños, disminuye la deserción escolar, enriquece el vocabulario, mejora las habilidades comunicativas, disminuye los niveles de estrés y ansiedad, y ayuda a ser más empáticos con el otro.
Por todo esto, los invitaron a leer en voz alta y a crear mundos maravillosos, donde el único límite fuera su imaginación.
El Día Mundial de la Lectura en Voz alta se instauró en 2010, a iniciativa de Pam Allyn, activista norteamericana cuya labor ha sido erradicar el analfabetismo. Su propósito es fomentar el hábito de la lectura, destacar la importancia de hacerlo en voz alta, visibilizar la alfabetización como un derecho humano fundamental y fomentar la creación de comunidades y grupos de lectura.
