El Departamento de Psicopedagogía, en colaboración con Personas Orientadoras Comunitarias (POC) y prestadoras de Servicio Social, ofreció el taller “Que no te cuenten cuentos, la violencia no es la única opción”, a fin de que los jóvenes del Colegio desarrollen habilidades que les permitan identificar y diferenciar los tipos de violencia que existen entre los estudiantes.
La actividad, con duración de una semana, fue conducida por Nancy María Vázquez Vargas, Ana Laura Ballesteros Gutiérrez y Estefany Morales Zamora, tres egresadas de la carrera de Pedagogía, que comenzaron por definir la violencia como “el uso intencional de la fuerza física o del poder para dañar a alguien”.
Sin embargo, no siempre es física, también puede ser emocional y psicológica, y puede suceder en muchos ámbitos, como en el familiar y en el noviazgo, explicó Ballesteros a la comunidad.
Acompañadas por las POC, las jóvenes organizaron sus actividades para exponer a los asistentes los procesos, dinámicas y herramientas con que cuentan para abordar de manera útil el tema, tal fue el caso del violentómetro, una escala que alerta sobre diferentes grados de violencia, así como los protocolos de denuncia existentes dentro y fuera del plantel.
“Una de las herramientas que más utilizamos es la conciencia, por ello es importante dar a conocer los conceptos, para que los chicos conozcan qué es un acto violento y así puedan identificar primero la alternativa preventiva y actuar correctamente”, agregó Vázquez Vargas a lo largo de las sesiones, que duraron dos horas en promedio.
Uno de los temas en los que hicieron mayor énfasis fue en la existencia de un protocolo que aplica para todas las instancias universiarias, incluidas las del bachillerato, para atender la violencia de género, porque una vez que se detecta hay que denunciarla y, en su caso, sancionarla.
Para ello, les explicaron, dentro del plantel cuentan con las Personas Orientadoras Comunitarias que son el primer contacto para guiar a quien lo solicite y llegar a las últimas consecuencias, con miras a erradicar prácticas violentas dentro de las instalaciones cecehacheras y universitarias.
Luego hay otras instancias y procedimientos por los que se les irá conduciendo en caso de requerirlo, para ello, deben estar al tanto de esos protocolos.
