Edgar Vega Toledano, profesor del Área de Ciencias Experimentales, tiene 10 años impartiendo la materia de Física en el Colegio de Ciencias y Humanidades y no duda en asegurar que la mejor experiencia que se puede tener como profesor es dentro de la UNAM.
“Es donde los chicos tiene el mejor comportamiento, siempre están atentos y callados (...) he estado en varias escuelas privadas y es diferente, no son como mis alumnos de la facultad o del CCH”, aseguró el docente, a quien un día invitaron a ser asistente del maestro de cómputo y se maravilló de dar clase. “Hoy soy jefe de sistemas”, refiere.
Para el docente del plantel Sur, quien también ha dado clases en Ingeniería y en B@UNAM, las clases a distancia fueron una buena experiencia, motivadora, que gustó a los chicos, porque se fueron integrando. “Una de las características de esta experiencia es que cada profesor tuvo oportunidad de desarrollar sus propios elementos, tareas o ejercicios, el diseño de la clase, sus presentaciones que se han podido ajustar y retomar”, destacó.
“Los profesores ponen todo su empeño en mejorar las clases y hacerlas interactivas aun estando a distancia; siempre mantienen el entusiasmo para enseñar.”
Natalia Verónica Cartagena
Alumna
“Nunca perdieron el entusiasmo ni las ganas de motivarnos a seguir. Tampoco fue fácil para ellos adaptarse y, a pesar de eso, fueron comprensivos.”
Montserrat Avilés Ramos
Alumna
“Yo destacaría su adaptabilidad, pero también su paciencia y empatía hacia los alumnos cuando surgía algo inesperado.”
Natalia Huerta Uribe
Alumna
“Los maestros tienen muchas cosas de las cuales presumir tras la pandemia, pero la más fue el intentar adaptarse.”
Emiliano Luna Islas
Alumno
“Tuvieron que aprender a transmitir sus conocimientos de otra forma, eso es algo que se admira y se agradece profundamente.”
José Emilio Rosales López
Alumno
