ecosistemas urbanos

Área de Ciencias Experimentales

Sitios que dan continuidad a los procesos ecológicos

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Sitios que dan continuidad a los procesos ecológicos

Cuando el premio Nobel de Química Paul J. Crutzen (1933–2021) habló sobre su trabajo realizado con la molécula de ozono y sus efectos en la vida de nuestro planeta, mencionaba que “en la actualidad estamos iniciando el Antropoceno, una era caracterizada por la dominancia de las actividades humanas, con efectos globales a gran escala: emisiones de CO2 y CH4, cambio climático, lluvia ácida y contaminación…”.

Desafortunadamente, no sólo fue parte de su discurso, estaba siendo enfático en problemas con impactos negativos a nivel planetario que estamos viviendo en la actualidad; a pesar de que en nuestro lenguaje cotidiano estamos familiarizados con conceptos como: disminución de la biodiversidad, aumento de la temperatura, cambio de uso de suelo, pérdida de ecosistemas y urbanización, entre otros, poco hemos logrado en las últimas dos décadas, es por ello que se requieren de acciones inmediatas para tratar de frenar dicha situación.

En este sentido, existen algunas propuestas esperanzadoras que forman parte de lo que conocemos como efectos cascada en los ecosistemas naturales, aunque generalmente se les otorga poco valor a los ecosistemas antrópicos (modificados por la acción del hombre) y particularmente a los que se encuentran en las grandes urbes, hoy en día se reconoce su papel en la continuidad de procesos ecológicos locales.

Este es el caso de los ecosistemas urbanos, muchos de nosotros los conocemos porque forman parte de los grandes parques, centros recreativos o sitios para realizar actividades deportivas y culturales, no obstante, esconden un gran valor ambiental debido a que pueden ser sitios de refugio de flora y fauna nativa, nos ofrecen servicios ambientales de gran valor como sitios de recarga de agua, aire limpio, islas de sombra, etcétera.

Poco se ha hablado sobre la importancia de los ecosistemas urbanos en la salud pública, y es que como resultado de la presencia de éstos, los niveles de la hormona cortisol disminuyen el estrés en las personas. Otro aspecto que se ha estudiado es la función de dichos sitios en la continuidad de procesos ecológicos como la polinización, fundamental desde el punto de vista de la conservación biológica y la recombinación genética en la reproducción de plantas.

Desde el punto de vista de la biología se ha reconocido que son sitios de enorme importancia, parece increíble, por ejemplo, que en la Ciudad de México tengamos mayor diversidad de aves que la de Reserva de la Biósfera de Calakmul, lo que evidencia que las ciudades pueden ser verdaderos refugios naturales de vida silvestre.  

Por lo anterior, podemos decir que una sociedad informada puede generar respuestas reales e inmediatas para atender problemas que nos involucran a todos. Debemos contar con la educación ambiental como una herramienta poderosa y ser conscientes del daño que podemos causar a las próximas generaciones si no realizamos algo en pro de la naturaleza.

Es difícil pensar en la conservación de los ecosistemas urbanos frente a las demandas del crecimiento poblacional y el desarrollo social, pero debe mantenerse el propósito del equilibrio ambiental entre la satisfacción de las verdaderas necesidades humanas y la conservación de los sistemas biológicos fundamentales, no sólo por la riqueza de la flora y la fauna, sino por la función ambiental que desempeñan en nuestra propia vida.   * Profesor del plantel Sur.

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