ajolote

Cuidan los huevecillos

Vallejo se ha convertido en hogar para el Ambystoma

Cuidan los huevecillos
Vallejo se ha convertido en hogar para el Ambystoma

Por todos es sabido que el ajolote es una especie en peligro de extinción y por eso el Siladin del plantel Vallejo hace investigación permanente para su preservación. Por ejemplo, hace poco culminó un curso a cargo de las profesoras Esperanza Ruiz Velasco Cruz, Diana Alejandra Cancino Martínez y Daniela Marcela Barranco Rivera, donde se habló sobre los cuidados de la especie.

Barranco Rivera, comisionada del acuario, explicó que había unos 400 huevecillos de Ambystoma mexicanum (ajolote) en proceso de maduración y que para mantenerlos a salvo, lo primero que tuvieron que hacer fue retirar a los ajolotes adultos, para evitar que se los comieran, “recordemos que son organismos que presentan canibalismo, además de que cuando tienen hambre y no hay comida accesible, ellos comen lo que es más fácil, en este caso serían los huevos”.

Una vez que los huevos están solos, expuso, se debe cuidar la temperatura del agua, pues son organismos de agua fría, así que se mantiene a unos 16 grados Celsius para favorecer la formación del embrión.

Otra cosa importante es que los huevos no se muevan de lugar hasta que pase el periodo de maduración, o sea, cuando se empiece a formar el embrión (su apariencia es como la de un frijol). Es entonces que se aprecia un pequeño ajolote, se puede decir que ha terminado su formación, esto lleva un periodo de 12 a 15 días.

Entonces, el proceso sigue su curso, pero la supervivencia de los huevos depende de varios factores: que todos hayan sido fecundados, que no se los coman otros ajolotes, la temperatura, calidad del agua y oxigenación.

Si no se realiza, es muy probable que el embrión muera, entonces será atacado por un hongo y se tiene que retirar para que no contamine a los demás.

Supongamos que todo salió bien, eclosionan los huevos y nacen los alevines de ajolotes, estos deben ser separados por días de eclosión, entonces hay que darles bastante alimento para que no se empiecen a comer entre ellos, recordemos que en las primeras etapas de crecimiento presentan un hambre voraz.

Para la supervivencia de los alevines debemos estar pendientes de la calidad del agua, oxígeno y es muy importante la temperatura para un buen desarrollo. Así que esperemos que los 400 huevos puedan desarrollarse bien, comentó Barranco, quien recordó que el ajolote es una especie endémica de México.

Se sabe que es una especie en peligro de extinción, dado que su población descendió de seis mil por kilómetro cuadrado, en 1998, a un ajolote por cada tres kilómetros cuadrados en 2014. Eso encendió las alarmas y la UNAM ha sido una de las instituciones interesadas en restaurar su equilibrio para ello, la máxima casa de estudios creó un albergue en la Cantera Oriente de la Reserva Ecológica del Pedregal de San Ángel (REPSA).

El CCH hizo lo propio en el Acuario, gracias a los trabajos que se hacen en el Siladin Vallejo, donde el ajolote ahora se reproduce. Entre las características más especiales de este anfibio destaca que vive alrededor de 15 años y es capaz de regenerar algunas partes de sus cuerpos, como sus extremidades y una zona  del corazón.  

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