Justicia ante el caos climático

Alertan sobre violencia latente

Amerita una reflexión seria y colectiva, alerta Ruiz de Oña

Alertan sobre violencia latente
Amerita una reflexión seria y colectiva, alerta Ruiz de Oña

Atravesamos una pandemia que ya duró mucho, junto con una serie de eventos y catástrofes climáticas hemos sido testigos de la exacerbación de conflictos bélicos y de violencia generalizada en todo el mundo, estamos en una coyuntura que merece una seria reflexión por parte de todos y todas, observó Celia Ruiz de Oña Plaza, investigadora interdisciplinaria con formación en Ciencias Ecológicas.

En un evento coordinado por el Programa Jóvenes hacia la investigación en Humanidades y Ciencias Sociales del CCH, la especialista en Conservación y Gestión Ecológica por la Universidad de Edimburgo puso énfasis en que este conjunto de sucesos no siempre actúa de manera evidente y están dando lugar a consecuencias inesperadas e inadvertidas.

Al hablar sobre el tema “Caos climático, justicia climática” expresó su confianza en que su exposición pueda inspirarlos y animarlos a dedicarse a abordar el estudio de un fenómeno tan complejo y multidireccional como es el cambio climático y a darse cuenta del momento en que nos encontramos como civilización, planeta y humanidad.

En su opinión, “los mantras de que la ciencia, tecnología o el mercado nos salvarán son falsas soluciones al cambio climático, nos despistan de los grandes problemas, porque son los que están en la base de los discursos y la política que domina el accionar del cambio climático”.

La licenciada en Ciencias de la Información con especialidad en Relaciones Internacionales por la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación en España planteó la necesidad de construir un reequilibrio que contrarreste el predominio de las ciencias duras, ambientales y de la tecnociencia, que han estado a la cabeza en esta problemática y este predominio que ha cerrado otras significaciones del cambio climático, otras formas de entender, abordar, estudiar e incluso desarrollar soluciones para este problema.

“Las Ciencias Sociales y las Humanidades juegan un papel importante en torno a abrir la investigación hacia posturas más críticas y que desmonten esos mantras que les comentaba. El cambio climático es un fenómeno que tiene que ver con una violencia ejercida y dirigida por una élite y sufrida por muchos”, alertó.

Al referirse al Capitaloceno, recordó que emerge como una crítica a la noción de Antropoceno,  palabra que ahora está en boca de todos y a menudo sin una visión crítica, el Capitaloceno busca rescatar y poner al frente la responsabilidad del sistema económico social en la generación de esta crisis, sobre todo de las élites que ahora mismo rigen los destinos de este planeta.

Es también un concepto que busca romper esa dicotomía que separa en dos esferas distintas a la naturaleza y el hombre, hay una interacción y es un todo.

Para la maestra en Desarrollo local y Gestión de recursos es necesario observar al cambio climático como una cuestión de violencia latente que alimenta violencias más evidentes y reconocidas, como un fenómeno de justicia climática y social, “y cada vez está más afianzado en la calle el activismo de la ciudadanía y movimientos sociales que se articulan y construyen nuevas formas de lucha, plantean soluciones y han dado lugar a liderazgos femeninos y de generaciones muy jóvenes, incluso adolescentes, que nos muestran cambios fundamentales en las mentalidades que vendrán a sustituir las que rigen ahora. Estoy esperanzada en este activismo, lo hemos visto también en la Cumbre COP26, en Glasgow”.

La doctora en Ciencias, Ecología y Medios Sustentables sostuvo que en sus investigaciones  ha tratado de rescatar y aplicar poco a poco a esta noción de justicia climática, pero anclada a un problema y territorio concreto, vinculada a observar el cambio climático como una forma de injusticia estructural, de violencia lenta, que tiene que ver mucho con las inequidades económicas, la desigualdad de los mercados nacionales, los desplazamientos forzosos de ciertas capas de la población y con una tremenda inequidad e injusticia del sistema económico. 

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