La compañía La Isla de Próspero presentó su última producción

Estrenan Las luces desaparecidas

La compañía La Isla de Próspero presentó su última producción

Estrenan Las luces desaparecidas
La compañía La Isla de Próspero presentó su última producción

Cuatro historias se entrelazan a través de la imagen mágica de un pez azul, hilo conductor para adentrarse a la vida cotidiana de hombres y mujeres atrapados por el deseo de recuperar aquello que los hace feliz y que no eligieron por diversas circunstancias.

Todas estas historias conforman Las luces desaparecidas, de Juan Alberto Alejos, tetralogía que fue representada por la Compañía de Teatro del CCH Isla de Próspero en la Escuela Nacional Preparatoria 7 “Ezequiel A. Chávez”.

“Se trata de obras relacionadas con el estudiante, donde vemos las consecuencias de no seguir la vocación. Cada una de las historias permite ver a gente que ha sufrido o padece por haberse dejado llevar por la corriente y que lucha por salir de ese círculo; es un teatro que habla a los adolescentes”, explicó Olivia Barrera, directora artística.

 

Antecedentes

Isla de Próspero se fundó en 2020 con la comunidad estudiantil y docente del CCH, su objetivo es hacer teatro desde y para la comunidad; con Las Luces desaparecidas se estrena la primera producción presencial de la Compañía y se cierra el Diplomado de Montaje Teatral en el contexto del bachillerato universitario, que inició en mayo.

La idea, señaló Barrera, es tener una compañía de profesores que lleve obras pensando en los adolescentes, de manera que los acerquen a ellos. Algunos integrantes ya habían estudiado teatro, y para otros fue su debut. Además, se busca llevar la obra completa o en partes a los planteles del Colegio.

La especialista destacó que en el diplomado se trabajaron los temas Creación de personaje, La voz para el teatro, El cuerpo en escena, Análisis dramático para la puesta en escena, Producción escénica y Montaje teatral.

Asimismo, externó la invitación a que más profesores y también alumnos se integren, “la idea es que la compañía crezca y podamos trabajar y montar obras pensando en la comunidad”.

 

La obra

Las luces desaparecidas está conformada por “El salto del pez Betta”, bajo la dirección Octavio Barreda Hoyos, con la participación de Natalia González Gottdiener y Abel E. F. Jurado; la segunda obra, “La ascensión de la cabra”, fue dirigida por Arcelia Lara Covarrubias, y participaron Mercedes de la Rosa, María Elena Núñez y Natalia González Gottdiener.

La tercera obra fue “El Sol de fantasía”, bajo la dirección de Juan Alberto Alejos, donde participaron Enrique Azúa Alatorre, Roberto J. Espinosa y Naomi Orduña; la puesta en escena concluye con “Los hijos del dios del aire”, que estuvo dirigida por Olivia Barrera y Ricardo Cruz, con Lulú Zamora Urbán, Taydé Mejía, Lidia García Cárdenas, Netzahualcóyotl Soria, Paola Nieto, Alejandro Velázquez Hernández, Pedro David Ordaz y Naomi Orduña.

 

“Estamos conectados”

Al referirse a la obra, Juan Alberto Alejos se congratuló de que se haya concretado la puesta en escena con la colaboración de profesores del CCH y exalumnos, porque “con ellos se le puede dar un toque especial a la representación, ya que se tienen varios motivos con el mundo universitario: la escuela, alumnos y maestros, es interesante que los mismos profesores le den vida a este universo”, dijo.

Compartió que “El salto del pez Betta” lo escribió en 2014 y “Los hijos del dios del aire” en 2017, por lo que volver a escuchar los diálogos, las líneas y ver el actuar fue impactante; “uno se imagina a los personajes, pero verlos ya encarnados por una persona y diciendo lo que uno sintió o experimentó en ese momento, es bastante interesante”.

En este sentido, explicó que lo más relevante es que lo importante de la obra lo sea también para los profesores; “es decir, que nos podamos sentir de algún modo conectados, el primer paso es que se sientan involucrados en el proyecto y después llegar a los chicos”.

Al respecto, deseó que el CCH siga haciendo teatro porque es una de las instituciones de la UNAM que más lo produce, pero que quizás no tiene gran proyección: “espero que sea una motivación para que se siga haciendo en los planteles; los profesores, al estar frente de las producciones, inspiran a los alumnos”.

Por último, invitó a los docentes interesados en el teatro a acercarse a la Compañía: “en el Colegio hay muchas actividades que forman parte del Programa de Difusión y Estudio del Teatro y si no son del CCH y les interesa, siempre hay posibilidades, el teatro es muy amplio y acepta a todo mundo”.

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