A partir de la visión histórica, filosófica, biológica y desde otras disciplinas, profesores del Colegio de Ciencias y Humanidades se reunieron en la Feria del Itacate, de la milpa a tu mesa, del Seminario Tlamatinime, para analizar el tema de la alimentación, cómo se ha transformado y la importancia de regresar poco a poco a los orígenes alimentarios mexicanos.
Luego de dos días de fructíferas actividades, el director del plantel Azcapotzalco, Javier Consuelo, señaló que la mejor manera de celebrar los 50 años del CCH es con una actividad interdisciplinaria, a cinco décadas “conservamos una parte esencial del Modelo Educativo: que nuestros alumnos construyan un pensamiento crítico” e interrelacionen los conocimientos con la vida cotidiana y hagan un vínculo cercano con sus familias. “Una felicitación al Seminario Tlamatinime por esta iniciativa que fue un ejercicio para engrandecer la cultura”, destacó.
La maestra Susana Huerta sostuvo que después de muchos esfuerzos, se logró el propósito de la Feria del Itacate. “El trabajo de principio a fin ha tenido muchas colaboraciones. Mostramos el interés y el entusiasmo. Sean felices, tengan salud, sigamos aquí en esta tierra, en el CCH, en el país, que tanto amo. Se cumple una fase y los invito a que sigan adelante”.
En el primer conversatorio con académicos y estudiantes compartieron su investigación sobre la Propuesta educativa. La emergencia mundial y recuperación de la dieta prehispánica, para exponer el tema de la alimentación mexicana, particularmente la que realizan los adolescentes, sus consecuencias en la salud, a nivel social y económico, así como la importancia de volver a la dieta de los pueblos originarios.
Desde la interdisciplina
Dicha actividad, que se realizó en línea, tuvo como objetivo recuperar y compartir los hallazgos de investigación, de discusiones, de trabajo con los estudiantes que se realizaron durante un año, “es también un pretexto para hablar de la alimentación que tienen nuestros alumnos, de cómo la sociedad capitalista ha llevado a un consumo inconsciente, y también para alcanzar a ver la dimensión de dicha problemática y cómo se vincula con la actual pandemia, lo que ha llevado a poblaciones más vulnerables”, así lo señaló la maestra María Guadalupe Quijada, al dar inicio al conversatorio.
En su intervención, la profesora Susana Huerta, que imparte la materia de Historia de México, hizo una breve exposición de cómo incorporó el estudio de la alimentación a sus clases, de manera transversal y a partir de las grandes transformaciones históricas; desde las culturas prehispánicas, que incluían en su dieta maíz, frijol, calabaza, chile y otras hierbas, hasta la conquista española y la incorporación de las carnes.
Y posteriormente el arribo del siglo XX y las implicaciones que ha traído el consumo de comida industrializada, así como su relación con el surgimiento de enfermedades y, por consiguiente, con la pandemia que se padece en estos momentos.
Participaron, entre otros, los académicos Teresa Matías, Ruth Betancourt, Gabriela Silva, Pedro Hesiquio, Graciela Maldonado, Carlos Esquivel, Teresa Matías, Nancy Martínez, José Guzmán y Guadalupe Quijada.
Por su parte, la maestra Piedad Solís, del plantel Naucalpan, afirmó que muchas personas, ante la pandemia, han elaborado opciones alimenticias para los estudiantes.
Consideró urgente enseñar a los jóvenes de las ciudades a cultivar sus productos en la azotea o en huertos verticales, porque hay más problemas aquí en la ciudad, “es triste ver a personas recoger verduras en las centrales de abasto”.
La Feria del Itacate concluyó con una Goya virtual en voz de profesores, estudiantes y funcionarios.
Tlamatinime es un término náhuatl interpretado como “los que saben algo”, “los que saben cosas”, “camino/guía veraz para otros…” o “los que dan forma al rostro y al corazón del hombre”.
