Estudiantes del plantel Sur tuvieron una gran participación en la IV Feria Internacional del Libro de las Universitarias y los Universitarios (Filuni), que se llevó a cabo de 30 de agosto al 4 de septiembre en el Centro de Exposiciones y Congresos de la UNAM, la cual les dejó una grata experiencia y enriqueció su panorama académico.
“La experiencia de asistir a la Filuni me pareció excepcional, poder observar el trabajo literario de las distintas universidades nos permitió extender nuestro panorama académico. La convivencia con los expositores fue bastante agradable y, sobre todo, conocer al Rector de nuestra Universidad; fue un evento muy valioso para nosotros como estudiantes”, consideró Carlos Arroyo.
Para Brisa Desiree Hernández Hernández, “vivir nuevas experiencias con amigos es increíble y lo es más cuando estás en un lugar donde tu imaginación vuela con los textos que lees”.
El arte de aprender y conocer nuevos escritores queda en mi memoria como estudiante y fan de la lectura, afirmó, por su parte, Lizeth Tirado M.
Diego Natanael Alfaro Elías comentó que empezaron con un recorrido que partió desde el plantel Sur, sus compañeros se mostraban interesados en la exposición y fueron recibidos con una bonita entrada, acorde con el tema central.
“Nos dieron un folleto para organizar nuestros horarios y realizar diferentes actividades. Por ejemplo, asistimos a un taller para crear nuestro propio minilibro; también pudimos tener un acercamiento a las obras de diversos autores. En lo personal, fue una de las experiencias más bonitas de mi estancia en el CCH”, consideró.
La experiencia en la Feria fue única, para ser la primera feria de libros a la que asisto. “¡Estuvo muy bonita!”, expresó, en su oportunidad, Alondra Gabriela García Aguilar
Mientras que para Fátima Coto Alonso fue una experiencia bastante grata; había libros de muchas disciplinas, incluso cómics, y tenían descuento. La actividad de hacer libros con cosas que tenemos en casa fue para comprender que a veces lo que vemos como basura puede transformarse en algo útil y que las cosas no tienen que ser perfectas, consideró.
La Feria ofreció una rica oferta entre conferencias, presentaciones de libros y revistas, charlas, conversatorios, mesas de diálogo, café literario, postpantallas, lectura de poesía y música, clases de danza y percusiones, café filosófico, así como talleres Letras en acción, “¡Manos al papel! Trazando historias”; “¿En el amor todo se vale?”, “¿Pueden sustituirse los libros?” y ciclos de cine, además más de 15 mil títulos de 350 sellos universitarios de 17 países.
