“Estamos viviendo en un mundo en el que nos acercamos otra vez a formas muy diversas de totalitarismo. Lo mismo en el Moscú no comunista de Putin o en el Washington capitalista de Trump. Lo vemos en actitudes políticas pero también en elementos que las superan como el peso que la Inteligencia Artificial tendrá en la gestación y el apoyo de los totalitarismos”, afirma Leonardo Padura en entrevista.
Leonardo Padura (La Habana, 1955) sabe muy bien de qué habla, pues el peso de los totalitarismos también recorre su monumental novela El hombre que amaba a los perros, exitosa obra que se considera un “clásico contemporáneo” y que este año cumple 15 años de su aparición.
Para celebrar el hecho, se ha publicado una edición especial conmemorativa y el autor participó en diversos eventos, como la plática que mantuvo con la coordinadora de Difusión Cultural de la UNAM, la también escritora Rosa Beltrán.
El hombre que amaba a los perros, novela traducida a múltiples idiomas y vendida por cientos de miles desde su publicación inicial, es una recreación del periplo de Trotsky a lo largo de 11 años, mientras huía del poder de Stalin, para lo cual necesita contar también la historia de Ramón Mercader, quien terminará asesinando a Trotsky en México, a las órdenes de Moscú.
Es, además, la historia de un escritor cubano que debe cuidar sus palabras mientras conoce por una buena fuente detalles inéditos del turbulento episodio y que confiesa al lector su propia biografía difícil en la isla.
“Fueron dos años de investigación y tres de escribir, sin dejar de buscar información, para hacer ese recorrido por el proceso de perversión de la gran utopía igualitaria, de esa sociedad de los iguales en la que íbamos a vivir con un máximo de libertad, en un máximo de democracia, ese proyecto tan hermoso que se frustró. Entraron en juego elementos de la experiencia personal. Toda mi vida adulta la he vivido en un país socialista. Esas vivencias decretan mucho el carácter de la novela”, comentó Padura, refiriéndose a la novela.