Vicente Quirarte ofreció una charla literaria en línea sobre su libro Fantasmas bajo la luz eléctrica, texto que realizó por encargo del también escritor Ignacio Padilla, quien coordinaba ediciones para la Universidad Iberoamericana y pertenecía, como él, a la Academia Mexicana de la lengua. Explicó que el título de la obra surge porque con la llegada de la luz, los fantasmas, acostumbrados a moverse con la escasa luminosidad de las velas, sin ella se irían, “pero encontraron otro modo de acercarse a nosotros”.
“Gracias por esta invitación y la posibilidad de estar en mi CCH, por qué digo mi CCH, por-que es muy importante el bachillerato para toda la Universidad. Yo estuve en la Universidad desde los 12 años, todavía no existía el Colegio, pero su existencia ha permitido que los jóvenes se forjen una conciencia muy temprana de lo que les espera en la vida. Agradezco la oportunidad de estar en esta colección maravillosa, La Academia para Jóvenes”.
El investigador expresó su beneplácito por la calidad de la edición a la vez que afirmó que los libros universitarios no tienen por qué ser feos,“yo creo que uno de los grandes retos que enfrentan las actuales editoriales es que el libro recupere su armadura original, sea ese gran guerrero con una historia de más de 500 años de vida, que ilumina y acompaña nuestra vida”. El prolífico autor mencionó algunas lecturas predilectas de Padilla como El Quijote de la Mancha, obra que también lo era de Carlos Fuentes, quien la releía en Semana Santa: “Considero que su lectura es un ejercicio espiritual, porque todo ejercicio, aunque se trate del cuerpo, ejercita el alma, mente sana en cuerpo sano, decían los sabios griegos”. El catedrático recomendó como una referencia al tema de su libro, la novela El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde, del escritor escocés Robert Louis Stevenson, un relato lleno de misterio, que guarda entre sus líneas una pregunta fundamental del ser humano: ¿Qué es el mal? ¿somos por naturaleza buenos... o malos? El autor habló de otras obras que también abordaron los temas de los capítulos de su libro: “Poe entre nosotros”, “Metamorfosis del lobo” y “Vampiros de esta lengua”. Mencionó al mexicano Pedro Castera, quien en su libro sobre el rescate de unos mineros, en el apartado Una noche entre los lobos describe la lucha del hombre con la parte brutal de la naturaleza. También se refirió a la obra de teatro de Emilio Carballido Guillermo y el nahual, un tema profundamente rural.
