mus

Museo de la Luz

La UNAM ofreció un amplio y diverso programa de talleres, conferencias, charlas e infografías

Museo de la Luz
La UNAM ofreció un amplio y diverso programa de talleres, conferencias, charlas e infografías

En el marco del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, la Universidad Nacional ofreció un amplio y diverso programa de talleres, conferencias, charlas e infografías para poner al alcance de la comunidad una discusión de gran importancia, como la producción y divulgación del conocimiento científico que generan las mujeres.

El Museo de la Luz, de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la UNAM, organizó la conferencia “Ciencia y género: una mirada a la historia”, impartida por la doctora Hortensia Moreno Esparza, del Centro de Investigaciones y Estudios de Género, quien hizo un recorrido por la incursión de las mujeres en el conocimiento científico desde una perspectiva histórica, pues durante décadas se ha promovido una expulsión de las mujeres de los espacios académicos.

En su intervención señaló algunos ejemplos históricos de cómo destacadas científicas vivieron experiencias de segregación en espacios que fueron considerados “sólo para varones”.

“Cuando Sophia Jex-Blake solicitó ingreso a la Facultad de Medicina de la Universidad de Edimburgo en 1869, le contestaron que no era decente que una mujer soltera asistiera a las clases. Tras organizar un grupo de siete mujeres, logró completar su primer año de estudios sin problemas”. Sin embargo, el segundo año tendría una nueva experiencia para acceder al curso de anatomía, pues las mujeres de la clase “encontraron su camino bloqueado por un grupo de varones que formaron barricadas, que les lanzaban lodo y les gritaban obscenidades; cuando ingresaron las mujeres al aula, se encontraron con que los hombres habían metido una oveja al salón, pues se habían dado por enterados que los ‘seres inferiores’ ya no estaban excluidos de las aulas”, relató la directora de la revista Debate Feminista.

Ya en el siglo XX, en Harvard, Marian Boyken Pour vivió discriminación también por ser mujer, pues tres asientos al frente, tres asientos atrás y dos asientos de cada lado de donde ella se encontraba quedaron vacíos, porque “los hombres eran positivamente incapaces de interactuar conmigo”.

La doctora Moreno Esparza refirió que los mecanismos de expulsión de las mujeres de los espacios académicos no están presentes solamente de manera formal, sino también con las actitudes y con las interacciones que las mujeres encuentran en ese baluarte masculino, que ha sido considerado como la identidad de los varones en nuestros tiempos.

Uno de los momentos en que podemos identificar esta problemática es en el ingreso de las mujeres a las universidades, pues “la pregunta aquí es dónde han estado las mujeres dentro de la ciencia, qué han hecho para pertenecer o dejar de pertenecer a este espacio, qué significa la feminidad en ese espacio”, reflexionó la invitada.

Sin embargo, siempre que la sociedad lo ha permitido, ha habido mujeres que contribuyen a la producción y diseminación del saber, pese a que son actividades muy restringidas en la existencia humana, porque quienes puede dedicarse a “las actividades del espíritu” son minorías sociales y están acotadas por posibilidades de disponibilidad de recursos, son aquellas y aquellos que disponen del tiempo para pensar, para leer, para escribir, quienes tienen resuelta la parte monetaria de su vida, pese a ello siempre ha habido problemas cuando se trata de pensar en si pueden entrar o no entrar las mujeres, ya que las actividades del espíritu no son actividades apropiadas para las mujeres, al menos en la civilización occidental.

Agregó que pese a esta tradición sexista, sí hay excepciones y desde el inicio de la producción cultural y científica siempre ha habido representantes mujeres “que han dejado huella en la historia, han quedado en documentos y son capaces de demostrar, desde Hipatia en adelante, la historia de Occidente está atravesada por esta circunstancia: cuando la sociedad lo ha permitido, las mujeres han podido participar en la creación del conocimiento y de la cultura”.

Compartir: