Bases de la investigación bibliográfica

Bases de la investigación bibliográfica

La historia puede ser reconstruida y revalorada

Bases de la investigación bibliográfica
La historia puede ser reconstruida y revalorada

Los documentos preservan información que sirve para reelaborar conocimientos a través del tiempo, destacó Libia Elena Barajas Mariscal, licenciada en Literatura Hispánica, al ofrecer la charla “Bases de la investigación bibliográfica”, organizada por la Dirección General de Divulgación de las Ciencia de la UNAM.

“Casi cualquier expresión humana es susceptible de ser contenida en algún tipo de soporte como las obras de arte, los textiles, las imágenes fijas o en movimiento, las grabaciones sonoras, canciones o programas de radio y televisión, todas puede ser un documento de investigación bibliográfica”, explicó.

Recordó que la investigación es un procedimiento científico y sistemático de indagación, recolección, organización, análisis  e interpretación de información o datos respecto a un determinado tema, que tiene la finalidad de construir nuevos conocimientos, para identificar algo nunca conocido o nuevos aspectos de realidades pasadas o presentes.

Como ejemplo, refirió que las investigaciones documentales pueden generar cambios rotundos y mover grandes estructuras sociales o políticas, como fue el caso del escándalo Watergate, que obligó al presidente Richard Nixon a dimitir como presidente de Estados Unidos.

También puede haber investigaciones documentales retrospectivas y prospectivas, que nos pueden ayudar a revalorar o reconstruir historias; como fue la participación de Malintzin en la conquista de México, porque hasta principios del siglo XX se tenía una historia distinta de ella.

Una investigación se puede hacer por dos vías, la primera por medio de los documentos a los que se pueden tener acceso y la segunda por medio de los documentos que ya se tienen, lo anterior lo facilita mucho porque uno puede interesarse por un punto en particular, señaló.

Otro aspecto importante es que “necesitamos mucha pasión y perseverancia para iniciar y continuar una investigación; así como para compilar, organizar e interpretar los datos, pero sobre todo, para no perder el hilo conductor y concluirla”, dijo a los interesados en el tema.

En cuanto a la redacción de la investigación documental o bibliográfica, recomendó mantener un permanente registro y pulcritud durante su desarrollo, destacar las principales ideas y empaparse del vocabulario referente al tipo de investigación.

También, utilizar adecuadamente los términos correspondientes, identificar claramente las conclusiones que se derivan de la organización, análisis e interpretación que se realiza de los documentos analizados y redactar en oraciones sencillas y precisas.

Para concluir, revisar la investigación completa, la redacción, las fuentes y tablas, antes de darla a conocer, incluso a personas de confianza; utilizar algún formato especial académico; consultar con pares la investigación; asumir con objetividad, las observaciones y publicar los resultados en los medios correspondientes o ante los públicos más adecuados, concluyó la autora de libros de divulgación científica. 

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