El Colegio de Ciencias y Humanidades, a través de SILADIN, el programa Jóvenes hacia la Investigación y sembrar vidas, presentaron, en nuestro plantel, la conferencia curiosidad de las plantas a cargo del doctor Miguel Jiménez Valdés.
A manera de introducción, Jiménez Valdés explicó: “la finalidad es que ustedes conozcan el papel de las plantas en una problemática como lo es el calentamiento global. Como personas jóvenes deben ser conscientes de la importancia de estos seres vivos ante esta situación”.
Un dato relevante mencionado en la conferencia es que se calcula que entre el 85% y el 95 % de la biomasa que hay en la tierra es vegetación, lo que implica un impacto importante en la biodiversidad. La importancia de las plantas radica en tres ejes fundamentales: ser la base la de cadena alimenticia, generar oxígeno a través de la fotosíntesis y servir como refugio para otros seres vivos.
Como ejemplo de supervivencia de las plantas, el ponente platicó el caso del ginkgo biloba, o árbol de los cuarenta escudos, la única planta que ha resistido los efectos de la bomba atómica, destacando su capacidad de resistencia una cualidad única de este tipo de planta y muy rara de encontrar.
“Las plantas a pesar de tener raíz, tallo, hojas, tienen células que poseen la capacidad de generar individuos nuevos con características determinadas que contienen receptores que las plantas funcionan como sus ojos”, detallo el también profesor.
Otra curiosidad que se mencionó fue el caso de las cactáceas que abren sus flores en la noche lo que permite la polinización, por parte de animales nocturnos. Además, se explicó la importancia del tipo de luz y el tiempo de exposición que puede ayudar en el desarrollo de cactáceas.
Un caso más fue el de la mimosa púdica, una planta con una cualidad en la que solo responde al tacto que un ser y si otro ser, organismo o forma toca la planta se cierra y después vuelve a abrir.
Entre otras características desconocidas de las plantas se platicó acerca del movimiento de las mismas más, no se desplazan. Además de poder hablar, de acuerdo a estudios realizados se ha demostrado esto se hace a través de la expulsión de gases logrando su comunicación, dando cierre a la conferencia.
