“Hay mitos sociales que imperan a través del tiempo y no podemos quitárnoslos de encima: las científicas son nerds, aburridas, sólo se dedican a trabajar, no son buenas investigadoras, no tienen vida y así le podríamos sumar muchísimos, no. Hoy quiero ofrecerles realidades de científicas mexicanas que han destacado”, afirmó Silvia Velasco Ruiz en su conferencia “Mitos y realidades de científicas mexicanas”.
Durante la charla virtual, la docente se refirió al trabajo de tres destacadas investigadoras y las mostró como seres comunes con una vida plena, echando abajo el prejuicio acerca de que esta área es cosa de hombres y la mujer sólo sirve para su casa. “La ciencia es para todos. Para quienes hicimos ciencia pura es fascinante descubrir cosas que nadie ha visto en otro momento. Llena de alegría y emoción escribir un artículo sobre ello”, sostuvo.
Luego tocó el turno a las tres mencionadas científicas. La primera fue la bióloga Valeria Souza Saldívar, quien considera que los científicos son las personas más libres del mundo. Ella trabaja en el Laboratorio de Evolución Molecular y Experimental, del Instituto de Ecología de la UNAM, y ha investigado acerca de la evolución de las bacterias, especialmente la Escherichia coli, que tenemos todos y de la cual posee una colección única en el mundo.
Además, ha sido férrea defensora del espacio de investigación Cuatro Ciénegas, porque junto con la NASA ha hecho estudios sobre la similitud de este lugar en relación con la Tierra temprana. En este sitio existe la mayor diversidad de bacterias, con más de tres mil 800 millones de años de antigüedad, explicó.
Las empresas Lala y Soriana, dijo, han extraído mucha agua de estas fosas. Y ella ha conversado con la población vecina para que se cuide el lugar y se mantenga con agua suficiente y así sobreviva la gran cantidad de especies que existen, aproximadamente 80, únicas en ese lugar, entre reptiles, anfibios y un bosque de cactáceas. Propone un turismo sustentable, pero remarca que no es lugar para la agricultura.
“Ya no tenemos tiempo, el planeta ha pasado por glaciaciones, la naturaleza se adapta, los humanos nos vamos a extinguir, somos una especie que requiere servicios ambientales. El mundo no nos necesita, nosotros a él sí”, afirmó la también catedrática de la Facultad de Ciencias.
Otra mujer científica es María Antonieta Fernández, quien considera que la Química es un arte y, en ese sentido, la creatividad es una de sus principales herramientas. Ella trabaja en el Departamento de Física Aplicada del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) Unidad Mérida, tiene un doctorado en Ciencias Químicas y un posdoctorado en Canadá. Ganó la beca Mujeres en la Ciencia L´Oréal-UNESCO-CONACIT-AMC en 2015 por obtener la síntesis, caracterización y estudio teórico de biomoléculas derivadas de carbohidratos, esteroides y aminoácidos.
Su mayor pasión es combinar productos naturales para hacer moléculas más complejas, desarrollar nuevas metodologías en síntesis orgánica, pero también le encanta bailar. Afirma que hay tiempo para todo: hacer ejercicio, divertirse, convivir con la familia, realizarse personalmente, tener hijos. La base de todo asegura, es organizarse.
Asimismo, fue resaltada la labor de Citlali Sánchez Aké, quien a los 27 años fue contratada para trabajar en el Instituto de Ciencias Aplicadas y la Tecnología de la UNAM. Ella es doctora en Ciencias e Ingeniería de Materiales y se le considera una promesa en la ciencia aplicada. “Puedo pasarme horas experimentando en el laboratorio, soy obsesiva, pero me divierto mucho”, sostiene.
En 2008 recibió la beca para las mujeres en la ciencia, otorgada por la Academia Mexicana de Ciencias y la Unesco. Lo que más le apasiona es el estudio de plasmas inducidos por láser para la síntesis y caracterización de materiales. Sus mejores momentos son bailar y su tiempo en el laboratorio, además de la práctica del taekwondo.
La maestra en Ciencias comentó que el programa de Jóvenes Hacia la Investigación ofrece una oportunidad para hacer estancias con investigadoras de esta talla. “Ustedes son las generaciones del cambio. La ciencia es una herramienta para resolver muchos de los problemas que hoy nos aquejan y son consecuencia del desorden ecológico que vivimos. La ciencia también es para las mujeres”, concluyó.
